Son dos grupos referenciales más influyentes del reggae nacional. Nonpalidece -junto a Resistencia Suburbana- llega el próximo 28 de octubre a mover la cordillera con un show imperdible que viene esperando una numerosa cantidad de sanjuaninos fieles a su ritmo. Luego de tener un exitoso paso por Uruguay, la banda liderada por Néstor Ramljack comienza una gira nacional con sus primeras paradas en Córdoba, Mendoza y por supuesto San Juan. El vocalista, descendiente de familia croata radicada en argentina, cuenta cómo el reggae marcó su vida y continúa expandiéndose por todo el país, siguiendo las inspiraciones de Bob Marley y la cultura rastafari. Previo a su visita, conversó con DIARIO DE CUYO su posición acerca del tan debatido asunto sobre la despenalización en el consumo de la marihuana.
– Vemos cosas diferentes en cada provincia que visitamos y resulta muy interesante más allá de la cantidad de gente que asista. Hace un tiempo que el reggae se ha establecido, incluso me sorprende saber que hay muchas bandas que surgen desde el interior, sacan sus propios discos y generan mucha repercusión. Me parece que este movimiento cultural ha crecido muchísimo, se va afianzado mucho, teniendo en cuenta que la mayoría las bandas son autogestionadas, desligadas de las compañías discográficas. El reggae goza de buena salud,
– Es un lema que sostenemos. El estilo natural jamaiquino tiene su raíz en el inglés. Cuando empezamos a traducir las letras, a investigar de qué se trataba, nos dimos cuentas que es muy importante lograr que nuestras canciones sean claras y entendibles. Por eso el español es fundamental en el proyecto, ya que nos hace conectar muy fuerte con todo el cordón sudamericano desde Ushuaia hasta México. Me parecía interesante que la letra se entienda de primera mano, sabiendo que somos una camada representativa del reggae en Latinoamérica.
– Apuntamos a lo segundo. Venimos de la explosión del reggae jamaiquino de la década del "70, con un contenido sociopolítico muy fuerte y vigente. De lo que vemos y vivimos en nuestro entorno, generamos un espacio de reflexión, nos adherimos a esa escuela. Expresarnos sobre la ecología, la política y la realidad social en un momento actual de aguas divididas y mucha violencia verbal. Por otro lado, el reggae también tiene un estilo dulce y cadencioso, donde se presta a que otros intérpretes tengan una mirada menos comprometida. Lo nuestro es un reggae más comprometido.
– Es una consigna esperanzadora acerca de la vida misma. Todos transitamos tiempos de tristeza y de infelicidad. Por lo que "no palidecer’ es ir apara adelante. Fue tomando un sentido importante para nosotros y la gente fue identificándose con eso.
– Todo se lo debo a Bob (Marley). Cuando lo escuché por primera vez, investigué su música y la de Los Wailers. Me llamó mucho la atención por el contexto social que vivía él, de extrema pobreza; y cómo desde la poesía pudo transformar su realidad. .
– Pero el concepto con el cual me quedo, es que el rastafari es una persona que busca el bien, que se conecta con la naturaleza, que tiene un grado de conciencia con el medio ambiente y además, quiere crecer y evolucionar. En este sentido, me considero un rastaman.
– Estamos a favor. No me siento un delincuente por fumar marihuana. No robo, ni violo leyes, de hecho pago mis impuestos, saco la basura antes de las 9, levanto la caca del perro de la vereda, hago lo que todo vecino hace para una buena convivencia. Mis elecciones individuales no tienen nada que ver con la ley.
– Todavía vivimos como en un "Gheto de los drogones’ y no me parece bueno esa discriminación. Pero en el fondo creo que vamos por buen camino, está interesante el debate. Somos pro en este tema, sin que ello implique necesariamente que lo expresemos en nuestras canciones. Entiendo que son libertades individuales. Levanto la bandera, pero no ando las 24 horas del día envuelto con la bandera o tenerla levantada por que sí. Cada uno es libre de hacer su elección, como quiera o como pueda.
