Saltó a la fama durante el Caso Cóppola "por defender un amigo que es inocente". Popularizó la frase "billetera mata galán", tuvo una infancia difícil, fue proxeneta, hizo saltar la banca de un casino, tiene un "chizito" célebre y forma parte del germen bizarro de la tele argentina. Grita, no habla. Pero es sinónimo de rating y su graciosa verborragia subversiva dice verdades que otros prefieren soslayar. Habitué de Crónica TV, trabaja con Pettinato en la tele, con Beto Casella en radio y en noviembre lanzará una publicación sobre su vida y el showbusiness. "Se van asustar", aseguró. Antes, charló con DIARIO DE CUYO.
– Llega el libro "Jacobo, mi verdad, toda la verdad". ¿Sincericidio biográfico?
– Y… hablo de todo. Se lanza en noviembre y cuento sobre mi niñez, cuando mis padres se escaparon de los campos de concentración de Auschwitz, cuando estuve en un asilo por problemas del vida, cuando fui adolescente y de repente tuve que vivir la noche, la televisión, el casino. También historias con personajes mundiales como cuando le llevaba el coche en el Sheraton a Rod Stewart, Tina Turner y Madonna. Un montón de cosas.
-¿Aparece Flavia Palmiero? Decís que Franco Macri paga su silencio…
– No es que lo digo yo, es real. Le regaló una casa en Barrio Parque de 3 millones de dólares. Es un hombre que está procesado y condenado por el correo, que se llevó todas las empresas a Brasil y que nos debe mil palos a todos los argentinos. La señora Palmiero no puede justificar semejante mansión porque es un regalo de Macri. El le da a cada una de sus mujeres 25 mil dólares por mes.
– ¿Por qué tu discurso es revelador y político?
– Yo no hablo porque tengo un micrófono y el aire es gratis. Este gobierno fue socio de Clarín, negocia con todo el mundo y la gente no puede creer que sea dueño de medio país. Lo que pasa es que este es un país de cag… y nadie dice la verdad.
– ¿Te considerás un mediático justiciero?
– A Jacobo lo toman como mediático, lo discriminan y lo toman como amarillo, pero voy de frente y digo lo que otros no se animan a decir. En mi libro voy a contar por qué Marcelo Tinelli, Ricardo Darín y Daniel Hadad van ir presos, qué gatos se acuestan con los políticos, todas las mujeres que tienen los impuestos de los argentinos y muchas cosas más. Se van asustar.
– Lo decís muy convencido ¿Tenés pruebas de todo lo que decís?
– Tengo muchas pruebas, fotos y aunque en esto me juegue la vida, voy a luchar para que Clarín no sea dueño de la Argentina. Quiero que la democracia se fortifique más y no quiero que los holdings transformen la opinión de la gente. Mientras haya un chico con hambre, no habrá democracia.
– Mucho escrache con nombre y apellido. ¿Tenés miedo de alguna represalia?
– Que me peguen un tiro, pero no me voy a callar. Si me llegan a matar el día de mañana, quiero que pongan en mi lápida, sobre todo por mi hija, "mi papá no fue un cag…" ¿Por qué no se ocupan del hambre de este pueblo en vez de hablar de Jacobo? ¿A quién le hacemos mal? Los mediáticos no le robamos plata a la gente como este gobierno.
– ¿Te sentís desdibujado en el programa de Pettinato? Granata acaparó todo…
– Le pregunté justamente si se acostaba con Amalia Granata porque le manejaba el programa. Parece que no nos quieren más con Guido Süller, porque Granata es el centro de todo. Pettinato era mi mejor cliente, me compraba 5 gatos por semana.
– Se armó un escandalete con tu declaración. ¿Y si te echan por esto?
– Es que es la verdad y no tengo miedo que me echen del canal América. Pettinato está celoso y molesto porque yo ahora soy columnista de Beto Casella, su mayor competencia en radio.
– ¿Cómo es Jacobo Winograd fuera del show?
– Yo no soy solamente el que se pelea con los Süller o que dispara contra los políticos. Atrás hay una persona que sabe mucho. Se van asustar todos con mi libro porque ahí van a conocerme mejor. Por ejemplo, toda la plata del libro será donada a colegios y hospitales. No quiero ni un centavo de ganancia.
– Tu discurso suena a proselitismo mediatizado…
– No puedo ser político ni quiero serlo, porque mi pasado me condena. Fui proxeneta, no tengo estudios y soy un atorrante de la noche. Sólo digo lo que siento, lo que vivo y la información que manejo. Yo hago muchas donaciones y a muchos gatos las obligo a donar dinero a instituciones porque sino revelo sus nombres. Hago lo que otros políticos no hacen. Digo la verdad y ayudo.

