Siempre me ha impresionado que en nuestra época hubieran tantos cantantes líricos españoles de primerísimo nivel pero no conociéramos óperas de ese país a pesar de los esfuerzos de un Tomás Bretón o luego de Isaac Albéniz o Manuel de Falla. Es por ello que en la necesidad de crear algo que fuese al menos un reemplazo de lo que faltaba apareció este género algo ‘menor’ conocido como ‘tonadilla’ que retomaba un aire de la calle y que se difundió rápidamente y contribuyó a la formación de un lenguaje musical que se convirtió en una ‘Zarzuela’ derivado de Zarza, uno de los sitios de residencia de los reyes de España. Es que el gusto italiano era tan fuerte que parecía hacer desaparecer lo ‘operístico’ español. A semejanza del ‘Singspiel’ alemán o de la ópera comique francesa combina canto y partes habladas. Federico Moreno Torroba (1891-1982), hijo de padre pianista, organista y Director quien dirigió el estreno de ‘El Amor Brujo’ de Manuel de Falla, siguió sus pasos hasta entrar en el conservatorio de Madrid. Moreno Torroba reconoce influencia de la Rusia de Rimsky Korsakov, Borodin y Moussorsky aunque su maestro -después de su padre- Conrado del Campo (1878-1953) era devoto de Wagner y R. Strauss.. Pero él debió reconocer que aunque pareciera más ‘serio’ y ‘profundo’ escribir Sinfonías, le era más redituable y popular volcarse a la zarzuela. Así como Strauss componía Valses y Operetas pero era un genial compositor así la formación de Moreno-Torroba evidencia a un eximio orquestador. En 1932 estrena ‘Luisa Fernanda’, en tres Actos ambientada entre Mayo y Octubre de 1868 durante una sublevación militar que supuso el destronamiento de Isabel II y se conoce como: ‘La Septembrina’ por el mes en que se llevó a cabo. Fue un intento de establecer un régimen democrático tras una crisis económica de 1866. Había un partido ‘moderado’ más conservador y garante de la Corona y el Partido ‘Liberal’ más ‘progresista’. I ACTO: Luisa Fernanda, hija de Don Fiorito, ya jubilado y monárquico es cortejada por un ascendente militar; Javier Moreno. Pero hay otro pretendiente; un rico labrador de Extremadura: Vidal Hernando. En una Plazuela, Doña Mariana y Rosita cantan: ‘Mi madre me criaba pa’chalequera’. Don Luis Nogales -revolucionario Liberal- está en la Posada. Hay cambio de ritmo y aparece pidiendo su levita y se retira contrariado. Mariana y Rosita prosiguen con la misma melodía inicial hasta que aparece la Duquesa y luego un soldado entona lo que se conoce como ‘El soldadito’ respondido por el Coro. Ingresa Javier, a cargo del tenor Fermín Prieto dueño de una voz realmente excelente que impresionó desde la primera nota. Mariana se burla de su ‘compromiso’ de amor para con Luisa Fernanda, pero él se defiende con: ‘De este apacible rincón de Madrid’ (las trompetas subrayan su condición castrense) que es un ‘Aria di bravura’. Pero no cesan los reproches de Mariana que se retira a Misa. Llega Aníbal, un joven que presenta a Luis Nogales, un ‘liberal’ que expresa sus ideas políticas hasta que éste se percata que la Duquesa Carolina (lógicamente monárquica) está justo a la ventana. La soprano Laura Pisan no solamente posee una bella voz sino que su ‘physique du rol’ hace creíble que pueda conquistar a Javier. Mariana, no en vano se burlaba del ‘compromiso’ de Javier. Directamente hace campaña por Vidal Hernando y aunque ella le explica al mismo Vidal que está con otro hombre, él se muestra dispuesto a esperar. Es el dúo ‘Mi tierra extremeña’. El barítono Fernando Lázari nos había deleitado como ‘Tevye’ el pasado 12 de Agosto en el concierto de ‘Musicales’. Se mezclan las ideas políticasàVidal se declara monárquico mientras que Javier sería ‘liberal’. Cuando Javier regresa se encuentra con la Duquesa que quiere acercarlo a su idea monárquica: ‘Caballero de alto plumero’. Vidal no parece muy firme pues se declara ahora ‘liberal’ II ACTO: Una nueva versión de ‘Marchaba a ser soldado’ a la que sigue ‘La mazurca de las sombrillas’ celebrando la Verbena (fiesta popular de un barrio asociada a algún Santo Patrono; en este caso ‘San Antonio Casamentero’). Sigue un dueto de la Duquesa y Javier con el Coro. La Duquesa intenta seducir al mismo Vidal hacia la causa monárquica pero éste cuenta la historia de un hombre que se creyó golondrina y cayó del árbol: ‘Para comprar a un hombre’. Javier siente celos de que Luisa F. esté con Vidal por lo cual ella se molesta y rompe relaciones con Javier Moreno: ‘Cuánto tiempo sin verte’, un trío. A la Duquesa Carolina se le ocurre una subasta para que los caballeros bailen con ella: ‘Señoras y Caballeros; acuérdense de los pobres’ Iniciado el remate,(por solistas del Coro) Vidal sube la apuesta a 50 onzas indignando así a Javier, pero Vidal le ‘cede’ el baile con la Duquesa y éste ofendido lo reta a duelo, aunque posponiéndolo. Al producirse un estallido revolucionario, Nogales, Aníbal y Vidal simpatizan con los Liberales. Mariana y Luisa están rezando. Vidal canta: ‘Luche la fe por el triunfo’ y deja entender que es indiferente a lo político; lo suyo es: ‘Por el amor de una mujer que adoro’.. La sublevación es sofocada y Aníbal es herido. El Coro entona: ‘Muera el prisionero, muera sin piedad’. Javier quiere detener a Vidal, pero Luis Nogales se declara ‘jefe de la conspiración’. Cuando Luisa Fernanda ve a Javier abrazando a la Duquesa se decide por el valiente Vidal. III ACTO: Con música festiva, estamos en Extremadura en la dehesa de Vidal Hernando. Como la Revolución ha triunfado, la reina Isabel ha perdido el trono, la Duquesa ha huido a Portugal y Javier ha desaparecido. Vidal canta: ‘En una dehesa de la Extremadura’ y la romanza ‘Ay mi morena’ -quizá el trozo más conocido de la obra-. Pero Javier está vivo y es llevado por Aníbal a la dehesa. Donde fuego hubo, cenizas quedan porque pesar de todo siente algo por el otro. Ella le suplica: ‘Cállate corazón’ (es un dúo con ‘violín obbligato’ de Nidal Jebali) y fue el momento más sencillamente hermoso de la noche. Luisa Fernanda -excelente Florencia Machado- busca una alegría forzada y el Coro retoma la melodía inicial de la Zarzuela. Vidal entonces se convence de que por más que ella quisiera mantener su palabra a quien verdaderamente ama es a Javier y dolido renuncia a casarse y permite que se una a Javier: ‘Un corazón que perdona no es una carga que pesa’ y queda sin su: ‘Morena clara’. Muy buenos cantantes solistas y Coro, maravillosa orquesta bajo la mágica conducción del Maestro Siffert, buena elección del Mozarteum.