Es la primera vez que Martín Ferres presenta un proyecto propio por fuera de Bajofondo, el colectivo liderado por Gustavo Santaolalla y que él integra como bandoneonista hace más de 20 años. Se llama "La maison Ferrés" por una particular razón y en esta "casa" musical fusiona exquisitamente su mítico bandoneón con música electrónica, tango y sonidos del folclore. Comparte este nuevo mundo compositivo con otro sanjuanino, Leandro Vega, a quien conoció por casualidad, resultó ser la pata que le faltaba a su idea y comenzaron a trabajar juntos. Ferres dirigió musicalmente cinco espectáculos finales de la Fiesta Nacional del Sol, y concentrado en eso también demoró este proyecto personal que ahora cobró forma.

Ayer comenzaron con los ensayos con la banda, con vista a algunas fechas que ya tienen en Buenos Aires, mientras que los primeros singles de "La maison" ya suenan en las plataformas y redes sociales. "La fiesta en la maison" es el primero -con dos versiones- y Piel y huesos se llama el segundo single, que son adelantos del primer disco de Ferres por fuera del colectivo de Santaolalla que irá presentando en vivo y lanzando por temas -como se estila desde hace tiempo- en plataformas. El músico habló con DIARIO DE CUYO sobre su debut como capitán de su propio barco musical, sobre San Juan, los entretelones del proyecto y cómo ve la industria musical. 

 -Es tu primer proyecto fuera de Bajofondo, ¿cómo se gestó?

-Siempre creí que iba a llegar ese momento. No soy una persona de estar con mucho trabajo al mismo tiempo, siento que necesito focalizarme en una para que funcione. Esto que de alguna manera era mi proyecto personal, que la vida me lo fue llevando a un proyecto personal compartido, en este caso con Leandro Vega, sanjuanino también con quien vengo trabajando hace 8 años. Siempre pensé, mucho antes de eso, que llegado el momento, yo tenía que desarrollar un proyecto con mis ideas, siempre en Bajofondo fue un lugar de apertura en el que pudimos volcar cada uno lo que ha querido, uno tiene su impronta más personal. En ese camino me encuentro a Leo, que termina de complementar todo el concepto que es hoy La maison.

-¿Qué significa el nombre, de dónde surgió?

-El origen del nombre tiene que ver con que yo tenía un estudio en Balvanera , donde empecé y gracias a una beca del Fondo Nacional de las Artes. No tenía dónde vivir y me alcanzó para alquilar seis meses y me compré una computadora. A partir de ahí empezó a ir bien. Lo conocí a Gustavo (Santaolalla), empecé en Bajofondo… Ese lugar se transformó en un lugar donde venían todos. En un gira Gustavo me dice: ‘Ese lugar es maravilloso, se tiene que llamar La maison Ferrés’. Mi apellido es sin acento, pero él le puso ‘Ferrés’ porque decía que tenía más ‘punch’. Así surgió y ‘La maison Ferrés’ que no soy sólo yo, sino que estoy con mi coequiper Leandro Vega y un montón de gente que está trabajando en la banda. Este es el origen.

Además significa ‘casa’ en francés y en inglés es ‘house’, el estilo de música electrónica que hacemos, así que queremos generar la idea de que esto es una casa de artistas, consolidada, donde entran y salen personas.

-¿El bandoneón sigue en el centro de la escena?

– Sí, por supuesto, yo toco el bandoneón así que toda la música que haga para mí tendrá ese instrumento de por medio, es la mejor manera que encontré para expresarme en vivo.

Este es un proyecto cuyo núcleo es sanjuanino, es una energía que proviene del interior del país por más que yo esté viviendo en Buenos Aires y en ese sentido nosotros agregamos a nuestra música el folclore. En "Fiesta en La maison" se puede apreciar el bombo legüero que fusiona con la electrónica. También un estilo que lo acerca al tango. Es una música nueva, yo la veo como una música paisajística que pone en un lugar imaginario, es un show para escuchar por momentos, para bailar en otros. La maison no es algo que sea moda. Es un proyecto que voy a trabajar toda mi vida. Seguramente irá transitando por distintos momentos. La música de este proyecto no tiene fecha de vencimiento. Rodolfo Mederos, mi maestro de bandoneón, decía que él no le gustaban las modas porque después las encontraba en las mesas de ofertas.

La maison es disruptiva en varios sentidos, tengo varias ideas que considero son innovadoras dentro de la industria musical, no sólo en el aspecto artístico, que tengo muchas ganas de poner en práctica ahora con este proyecto.

-¿Qué ideas por ejemplo?

-Por lo pronto lo estamos desarrollando de manera absolutamente independiente y una de las cosas que más me interesa es generar un vínculo más directo entre el artista y la persona que escucha al artista, sin intermediarios. No es que vengo a voltear la industria, porque claramente el intermediario es la discográfica, pero la realidad es que ellos han descuidado ese vínculo. También en la producción de los shows. Más allá del circuito que está armado de productores, yo planeo una coproducción. Hay cosas que hay que replantear, sin dejar de lado lo que está en funcionamiento, pero en lo personal siempre fui una persona que le gusta abrir caminos que transitar los que están hechos. Y por otro lado, en esos caminos consolidados trabajo con la mejor persona que podría hacerlo en la industria musical, que es Gustavo Santaolalla.
 
-¿Por qué ahora sentiste que es el tiempo de este lanzamiento? 

-Pasaron algunas cosas personales ahora, también pasó que con Bajofondo, si bien terminamos de grabar y tenemos un discazo que saldrá este año, estamos tocando menos en vivo. Ese espacio de tiempo lo usé y la energía, además de la necesidad de ser yo al 100 por ciento. Durante los últimos años también me pasó que fui papá, tengo dos hijos (un nene de 11 y una niña de 4), y eso hizo que quisiera hacer cosas que me permitieran quedarme para no salir tanto por decirlo así, estar cerca de mis hijos y verlos crecer. 
 
-Y el último tiempo estuviste además ocupado con la Fiesta Nacional del Sol. 

-Sí, sí con todo lo hermoso que fue ese proceso en el sentido personal y profesional. Cuando elijo hacer el trabajo en la Fiesta del Sol (no soy una persona de estar atada a algo) esto tenía que ver con esto de estar cerca de los chicos, además me vinculaba con mi familia en San Juan, me obligaba a ir a allá en algunas oportunidades y a su vez no era estar viajando todo el tiempo y ausentarme como si estuviera con un proyecto musical. Y además de lo profesional, por las cosas que hicimos, fue un trabajo alucinante. 

-¿Qué te dijo Santaolalla del proyecto?

-Tengo gran respeto y cariño por Gustavo y todos mis compañeros. Quería compartir esto con ellos primero porque son mis amigos, con ellos he compartido más tiempo que con mi familia en más de 20 años de giras. Además siempre he sido respetuoso y cuidadoso porque en Bajofondo hemos desarrollado un concepto, una marca, una historia que hay que cuidar, porque es algo muy valioso que construimos con mucho esfuerzo. Todos me brindaron su apoyo total, por supuesto que son personas muy profesionales y talentosas, entonces lo que tenía que tener mi proyecto para mostrárselos es que estuviese bueno porque son muy exigentes, entonces la vara era muy alta y les gustó.

El coequiper

Leandro Vega es el 50 por ciento de "La maison Ferrés" dice Martín Ferres. También es sanjuanino, es productor musical y diseñador de sonido, trabaja en desarrolla de música electrónica. Es coautor de "Aura" tema de Bajofondo y a intervenido en uno de los que componen el próximo álbum aún sin lanzar. "Es un chico que tiene un talento a nivel internacional. Estoy acostumbrado a trabajar con gente de muy alto vuelo y leo pertenece a esos lugares.¸·<