Omar B. desapareció en 1997, cuando contaba con solo 19 años, durante la guerra civil que por entonces sacudía a Argelia, en África. Los buscaron durante un tiempo y finalmente la familia y las autoridades concluyeron que había sido víctima de la conflagración interna.
Nadie supo de él, ni de su paradero y ni siquiera si seguía vivo. Con el paso de los se lo dio por muerto.

Sin embargo, 27 años después de su desaparición, el ahora hombre adulto fue hallado en el sótano de la casa de su vecino, a pocos metros de donde vivía con su familia en 1997.

Según la información que se difundió en las últimas horas y se viralizó en redes sociales, Omar se dirigía a un establecimiento educativo cuando se convirtió en víctima de un rapto a solo 200 metros de su casa.

Su secuestrador en Djelfa, en la zona norte del país, fue detenido cuando intentaba escapar de la policía luego de la denuncia del hermano del victimario, quien se peleó con el secuestrador en medio de un conflicto por una herencia.

La víctima, ahora con 45 años, fue encontrada en medio de montones de paja y basura y explicó a los agentes que nunca pidió ayuda porque su captor le había “lanzado un hechizo”.