Un chofer de un colectivo que, según trascendió, hace viajes al Este de San Juan terminó su turno y cuando empezó a limpiar la unidad se llevó una gran sorpresa.
Si bien siempre la gente olvida cosas -como anteojos, billeteras y hasta celulares-, este olvido le llamó particularmente la atención: se topó con un consolador, objeto sexual de placer íntimo.
Según informó El Sol de San Juan, el conductor lo sacó de la unidad y lo dejó guardado en la empresa, donde esperan a que su dueño o dueña lo retire. Hasta el momento nadie se hizo cargo.