A Luken, un nene de 5 años de Bedia, un pueblo de Bizkaia, España, le encanta pintarse las uñas. Hace poco, le contó a su papá que muchos lo llamaban mariquita por eso, y el hombre tuvo una original reacción que no tardó mucho en volverse viral.

 

“Me enfadé mucho y pensé en alguna forma de quejarme”, contó Fernando Ruiz. Fue entonces cuando decidió pedirle a su hijo que le pinte las uñas a él también. Juntos se sacaron varias fotos y Ruiz escribió una publicación en su cuenta de Facebook que ya fue compartida más de 37 mil veces.

 

“A mi HIJO le encanta pintarse las uñas y yo le apoyo dejando que me las pinte a mí. Lo hago debido a que últimamente pide que se las limpiemos antes de ir al colegio porque algunos de sus compañeros de clase de 5 AÑOS se burlan y comentan que es una niña o un mariquita y él se pone triste”, se lee en el escrito.

 

“Intentamos convencerle de que el problema lo tiene el que mira sin ver, pero es duro verle así. Aunque lo que más me entristece a mí es el estado del cerebro de esos niños que sin duda están siendo encauzados hacia unas ideas retrógradas, anticuadas y sexistas”, agrega el hombre.

 

“Pido a los padres que piensen en el tipo de ideas que están implantando en esos cerebritos en pleno desarrollo y qué cicatrices les van a provocar. Además de lo que va a costar borrarlas, si es que es posible. Vivan las uñas de colores. Viva Luken”, concluye el posteo.

 

 

“No saben el daño que pueden infringir en muchos niños fomentando la intolerancia. Estoy convencido de que los niños que se meten con Luken le han contado a sus padres que se pinta las uñas y ellos habrán contestado: ‘Eso es de niñas’. No se pueden decir esas cosas a niños pequeños. Pido a los padres que no inculquen sus prejuicios a sus hijos. Ese poso se queda ahí. Me enfada mucho que se metan con él”, aseguró el hombre al portal Verne.