El barrio porteño de Palermo Soho se caracteriza por sus bares, restaurantes y comercios. Sin embargo, la semana empezó convulsionada luego de que organismos protectores de animales denunciaron por crueldad animal a una mueblería por exhibir en la vidriera a un caballo miniatura, de la raza Falabella.

 

Un local de decoración y muebles fue centro de todas las miradas. Y no por la calidad de su madera o los diseños: un Falabella, perteneciente a la raza de caballos más pequeña del mundo, estaba ubicado en un la vidriera del local. El animal se movía de un lado para el otro, siempre dentro de los márgenes del pequeño "corral". Fotos y videos del "caballito" comenzaron a inundar las redes sociales.

 

Rápidamente, un organismo de protección animal denunció en la fiscalía de la comuna 14 al dueño del local por crueldad y maltrato animal. El caso podría significarle al comerciante una pena de entre 15 y 1 año de prisión. La policía junto a médicos veterinarios se acercaron al local para realizar el procedimiento. Los especialistas resolvieron que el caballo miniatura no podía permanecer en el lugar y, finalmente, fue llevado a un establo en Pilar.

 

El dueño del local, ubicado en Serrano y Niceto Vega, defendió la presencia de "Tuco", el caballo que mide entre 70 y 85 centímetros de alto, dentro de la mueblería: "La idea era regalarle una semana a los niños para que interactúen con los caballos sin ningún tipo de fin económico. Dejamos que se mueva libremente por todo el local", justificó. Otro de los dueños del local afirmó que el animal "no tiene estrés" y sostuvo que "no lo tenían permanentemente".

 

"El caballo estuvo todo el día expuesto al sol, no tenía agua ni comida. Un pony no tiene que estar en un lugar de muebles, pertenece a otro ámbito", expresó indignada una de las denunciantes.