Elegir una mascota es sumar otro miembro a la familia, que te querrá y acompañará siempre. Sin embargo, antes de decidir si incorporar un perrito o un gatito, es importante ser conscientes de la responsabilidad que conllevan y de las necesidades concretas que tienen y que hay que satisfacer.

Son seres que necesitan de nuestro tiempo, cariño y cuidados, en especial cuando están en edades más tempranas y que representan un compromiso a largo plazo que no podemos eludir.  

Según los expertos antes de recibir un cachorrito o un gatito en casa, hay que ser consciente del gasto extra que implica (alimentación, veterinario, accesorios…) y valorar también si realmente tienes tiempo para estar con él y atenderlo adecuadamente (educación, juegos, paseos…). Además, es importante tener en mente el tipo de hogar que tienes y el espacio disponible, cuántos miembros son en tu familia y si todos están de acuerdo en tener una mascota.

También hay que dar respuesta a una pregunta fundamental: ¿Sos más de perros o de gatos? Es importante pensarlo bien y no dejarnos llevar.

Para eso, es necesario tener en cuneta algunas claves que pueden darte pistas para entender cómo es cada tipo de mascota y ver cuál podría encajar mejor contigo.

POSIBLEMENTE ERES MÁS DE PERROS SI…

– La aventura, el deporte y la naturaleza están en tu ADN. Las actividades de ocio al aire libre son perfectas para realizarlas acompañado de un perro. Disfrutaréis y crearéis un vínculo muy potente.

– Tienes horarios más flexibles. Los perros necesitan una dedicación mayor que los gatos. Deben dar dos o tres paseos al día y lo ideal es dividir su ración diaria de alimento en dos o tres tomas. Si tienes un horario flexible te resultará será más sencillo atenderles como merecen y necesitan.

– Eres ordenado y te gusta seguir una rutina. Como decíamos en el anterior punto, los perros tienen ciertas necesidades concretas a lo largo del día. Planificarlas y crear ciertas rutinas con el perro será clave. Por ello, si eres una persona que normalmente se organiza bien, esta característica será un plus de valor añadido en la relación con tu mascota

– Eres cariñoso. Los canes tienden a ser “animales de manada”. Aprecian mucho las muestras de afecto y el contacto con los humanos.

– Te gusta conocer gente nueva. Los paseos y las visitas al parque serán un punto de encuentro con otros amigos perrunos. De manera natural los perros se acercan entre sí, para olerse y conocerse… y esto hará que tú también lo hagas y conozcas gente nueva cada día.

LA MEJOR OPCIÓN PARA TU ESTILO DE VIDA SERÍA OPTAR POR UN GATITO SI…

– Te gustan los planes tranquilos y te defines como una persona calmada. Los gatos duermen muchas horas al día, aunque también tienen momentos de actividad intensa. Estos momentos de mayor interacción, suelen realizarse en el interior de la vivienda y no es necesario salir al exterior con ellos. Por tanto, tu estilo de vida se complementará perfectamente con sus hábitos.

– Trabajas fuera de casa y tu jornada laboral suele alargarse. Los felinos invierten más de 16 horas al día en dormir. Puede que, durante tu horario laboral, el 90% del tiempo ellos decidan dormir una siestita. Y, por tanto, se adaptarán mucho mejor a tu ausencia.

– Viajas con bastante frecuencia. Ya sea por ocio o por trabajo, pero pasas periodos cortos fuera de casa. Siempre será más sencillo adaptar tus momentos de viaje teniendo un gato. Los gatos son más autónomos y pueden autorregularse solos, por lo que teniendo su comida y agua a su disposición estarían bien. O, si estás fuera durante un par de días, con un poquito de ayuda de un familiar o amigo podrá podrías tenerlo muy bien cuidado.

– Eres independiente. Los gatos necesitan muestras de amor y cariño, pero cuidado, no siempre. Solo cuando a ellos les apetece, son mucho más selectivos… Incluso a veces, suelen aislarse o alejarse del ruido o de la presencia de los dueños humanos para estar tranquilos y relajados.

– Te gusta pasar momentos contigo mismo. Los gatos no tienen demasiada necesidad de estar en contacto con otras mascotas (con los perros suele ser diferente). Si te gusta disfrutar de tu intimidad o prefieres reunirte con grupos reducidos de personas, que son tu “gente de siempre”, tu carácter encajará mucho mejor con el de un gatito.  

No obstante, es importante tener en cuenta que no son características concluyentes. Es decir, puede que seas una persona tranquila pero que un perro complemente tu día a día perfectamente. Por tanto, lo más importante es, teniendo en cuenta estas nociones sobre cada estilo de mascota, tomar la decisión de manera meditada y garantizar, incluso antes de su incorporación al hogar, que vamos a poder ofrecerle todo lo que necesita para garantizar su bienestar.

Fuente: ¡Hola!