Las autoridades de Brasil informaron el sábado el hallazgo de nueve cuerpos en una embarcación a la deriva frente al estado de Pará (norte), en la Amazonía brasileña, con documentos que sugieren que las víctimas eran migrantes africanos. Originalmente se había mencionado que eran refugiados haitianos, pero se confirmó que eran de Mauritania y Malí, entre otras posibles nacionalidades.

QUÉ SE SABE DEL HALLAZGO DE CADÁVERES EN LA AMAZONÍA BRASILEÑA

El descubrimiento ocurrió entre las localidades de Braganca y Quatipuru, cuando pescadores encontraron la embarcación en aguas del océano Atlántico. Aunque se especuló sobre la posibilidad de que las muertes fueran por hambre y deshidratación, las investigaciones aún no han determinado las causas exactas del siniestro.

Un comunicado de la Policía Federal aclaró que fueron hallados nueve cuerpos en total, ocho dentro de la embarcación y otro flotando próximo a la misma, frente a las versiones iniciales que indicaban que sería una veintena de cadáveres.

Este trágico suceso resalta la peligrosidad de la ruta del Atlántico desde África hacia la Unión Europea, considerada una de las más riesgosas del mundo. Los migrantes a menudo enfrentan condiciones extremas en el mar, con casos de embarcaciones a la deriva durante meses y personas que saltan al océano por desesperación.

El aumento significativo de la inmigración desde la costa noroccidental africana a España generó preocupación en las autoridades europeas. Aunque se implementaron acuerdos y medidas para abordar esta situación, como el acuerdo de 210 millones de euros entre la Unión Europea y Mauritania, la problemática persiste.

Según el Ministerio español del Interior, más de 13.000 migrantes han llegado a las Islas Canarias en lo que va del año, pero hay reportes de cientos de desaparecidos. En Mauritania, las familias crearon una “comisión nacional” para buscar a los migrantes desaparecidos y están siguiendo de cerca las noticias sobre el barco encontrado en Brasil, según informaron familias a Associated Press.