Los vecinos del barrio porteño de Caballito hicieron "justicia por mano propia" con el dueño de un Porsche Carrera 4 convertible, quien lo dejó estacionado sobre la senda peatonal violando así una de las leyes de tránsito más elementales, y se lo llenaron de basura.

La reacción del dueño del lujoso auto cuando se encontró con su vehículo transformado en un "tacho de basura" es desopilante.