Una auténtica máquina de golpear. Un zurdazo devastador y la gloria. El camerunés Francis Ngannou noqueó en la madrugada de este domingo al estadounidense Stipe Miocic en el segundo asalto de la pelea estelar que se desarrolló en Las Vegas y se consagró campeón de peso pesado de la UFC.
Fue la segunda vez que se enfrentaron sobre un octágono y Ngannou antes había caído por decisión tras completar los cinco asaltos. Sin embargo, el peleador camerunés aprendió de los errores del pasado y triunfó. “El Depredador” fue más sólido que en el primer duelo en 2018. Así, acabó con el reinado de uno de los pesos pesados más completos de la historia.
Miocic se sorprendió. Ngannou conectó varias manos poderosas a ras de lona y exhibió una gran evolución técnica. El estadounidense hizo valer su experiencia, su tolerancia al castigo y salió como pudo de semejante poder.
En el segundo asalto una izquierda del camerunés resultó demoledora. Miocic intentó soportar el embate, quiso contestar a un directo, pero Ngannou lo recibió con un gran gancho de izquierda que terminó por decretar el KO.
El camerunés se convirtió en el primer campeón africano de la historia de peso pesado de la UFC y en el tercer monarca del continente, en activo, tras los nigerianos Kamaru Usman e Israel Adesanya. Ngannou, de 34 años, aspiró alguna vez a ser boxeador, pero descubrió las artes marciales mixtas tras emigrar de Camerún a Francia. Cuando llegó a Europa estuvo durante tres meses durmiendo en la calles de París, según contó en una entrevista a The Players Tribune en 2017. “Tenía 26 años y seguía sin tener nada. Estaba en un lugar en donde no conocía a nadie. Los obstáculos eran incluso mayores que los que tenía en Camerún. Pero ahora algo era diferente”, dijo Ngannou.
Comenzó a incursionar en el mundo de la artes marciales mixtas, cuando el dueño de un gimnasio le explicó que no iba a ganar dinero con en el boxeo, sino que lo iba a conseguir peleando en UFC. Así que comenzó a pelear y debutó en diciembre de 2015 en UFC, cuando venció al brasileño Luis Henrique en Orlando, en los Estados Unidos.
Desde que comenzó a pelear en la UFC, ya consiguió 11 triunfos, 2 derrotas: “Vengo de la nada. Trabajé todos los días para llegar a donde estoy, pero sé que hay tantos otros que nunca serán tan afortunados como yo, que nunca podrán llegar tan lejos como he llegado”.