En estos últimos años tras la pandemia del covid-19 las denuncias por estafas bancarias crecieron en la Argentina considerablemente a tal punto que Odila (Observatorio de Delitos Informáticos de Latinoamérica) señaló que el 28% de la población resultó víctima de alguna de las tantas modalidades de estafas bancarias a través del servicio de correo electrónico.
Especialistas en el tema sostienen que en países como la Argentina siempre han sido muy comunes los casos de "phishing", pero en los últimos tiempos también se han incrementado los casos de "vishing", que es la misma metodología de engaño y fraude pero a través de llamadas de voz. También está el "smishing", que es una metodología de fraude a través de SMS o mensajes de redes sociales o el "ransomware" que es un tipo de archivo dañino que secuestra archivos y pide rescate concretando el fraude.
En todos los casos, desde la Secretaría de Estado de Seguridad y Orden Público advierten para quienes puedan haber sido víctimas de alguna estafa, que deben llamar al 911, acercándose a la Central de Policía o a cualquier dependencia policial para radicar la denuncia para que comience la investigación.
Asimismo, en esta temporada estival, se detectó otra nueva metodología de estafa utilizando los alquileres de cabañas y casas de fin de semana. En estos casos, los estafadores crean perfiles falsos de propiedades en internet y así engañan a las personas para sustraerles dinero. En estos casos, se recomienda chequear en sitios oficiales y no efectuar el pago online hasta tanto haber confirmado la veracidad de la publicación.
Entre las estafas virtuales más comunes figuran las siguientes: Llamada de alguien que suena como un familiar, pidiéndole dinero, transferencia bancaria o tarjetas de regalo para ayudarle a salir de algún problema. Robo de identidad a través de redes sociales y aplicaciones de mensajería. Cobro de deudas. Falsos perfiles en redes sociales. Páginas web y redes sociales no oficiales. Oportunidades de negocios y robo de identidad mediante el envío de mensajes de páginas web que son similares a los sitios.
Respecto de las estafas bancarias las entidades bancarias conocen estas metodologías, y que han venido manejando el riesgo adecuadamente, pero que muchas veces resultan desbordadas y es cuando se registran la mayor cantidad de estafas.
Para evitar que estos hechos no deterioren la confianza del sistema financiero y de los usuarios las entidades deben recurrir a readaptar sus herramientas y metodologías de detección para lidiar con el problema. Los más afectados son los usuarios normales que debido a su desconocimiento de la tecnología y del crecimiento del cibercrimen los afecta directamente. A consecuencia de esto miles de ciudadanos afectados han iniciado acciones judiciales para que se reconozcan sus pérdidas económicas y la falta de prevención de las entidades, que son las que deberán optimizar sus sistemas de seguridad para seguir dándole a los clientes las mayores garantías.
