Cada tanto, hay empresas locales o institutos de investigaciones privados, estatales o universitarios que desde nuestro país trascienden al mundo con el desarrollo de tecnología que es muy apreciada a nivel global. Esta incursión en la economía del conocimiento debe ser promovida y apoyada con el objeto de que Argentina encuentre en esta área una alternativa de desarrollo económico que en el futuro, además, le permitirá posicionarse entre los países más avanzados del planeta.
En este marco, la producción de software para ser aplicados en distintas áreas de la producción y de los servicios, es una de las actividades con mayores posibilidades de desarrollo, muy bien considerada tanto a nivel local como en el exterior. Un ejemplo que demuestra el potencial que se dispone lo constituye la empresa Baufest, un emprendimiento privado totalmente argentino dedicado al desarrollo de software, con oficinas en EEUU, España, Chile y México, cuyos ingresos provienen en un 30% de la exportación.
Al igual que las demás empresas del rubro producir calidad es el principal objetivo de esta firma que ha desarrollado el sistema utilizado por el plan Procrear de viviendas. El software correspondiente contiene la base de datos única a nivel país de los destinatarios de viviendas sociales, una información sumamente valiosa.
Respecto de la producción agrícola esta misma empresa ideó un software para sistematizar el desarrollo de las semillas y para la compañía B-cycle de Estados Unidos le organizaron la logística de las bicicletas públicas que administran en distintas ciudades latinoamericanas, desde Los Ángeles hasta Santiago de Chile.
Pero uno de los aportes de mayor renombre y, tal vez uno de los menos pensados, es el que le hicieron a la automotriz Toyota, a la que le idearon el software que guía la fabricación de los chasis para las camionetas que desde la planta de Zárate salen hacia todo el mundo.
Es necesario consignar que la economía del conocimiento es el sector de la economía que utiliza el conocimiento como elemento fundamental para generar valor y riqueza por medio de su transformación a información. En este contexto los software representan un producto de gran demanda a nivel mundial. Sólo hay que promover un poco más esta actividad y apoyarla, creando el ámbito propicio en materia tributaria y laboral para un pleno desarrollo, e interesando cada vez a los argentinos a dedicarse a esta actividad.