El informe semestral de la Comisión de Libertad de Prensa de la Asociación de Entidades Periodísticas Argentinas (ADEPA) es tan atípico como el momento que enfoca el análisis en tiempos del confinamiento social por efecto de la pandemia de coronavirus, y observa el comportamiento no sólo de los medios argentinos sino de todo el mundo, valorando el desempeño de la prensa independiente como una necesidad imprescindible para estar cabalmente informados. La necesidad de contar con el periodismo y los medios para testimoniar y analizar un acontecimiento sin precedentes en la historia de la humanidad se refleja en que todos han estado enfocados en el mismo hecho, con mayor o menor libertad, según el país y la cobertura.
Precisamente, como señala ADEPA, la libertad siempre se ve amenazada ante el temor de lo desconocido y se ha comprobado el hostigamiento a medios y periodistas por expresar la realidad de la crisis, caso de Cuba, Venezuela y Nicaragua, con regímenes antidemocráticos, pero también han tenido que soportar la intolerancia de gobiernos como el de Estados Unidos, donde la libertad de prensa ha sido ejemplar. Más grave lo ocurrido en China, origen del Covid-19, porque la censura obligó a la prensa a ocultar la gravedad de una epidemia que se tornaba en incontrolable, perdiéndose un tiempo valioso para resguardo de toda la humanidad.
Pero en esta emergencia hubo otros países, la mayoría, cuyos gobiernos conscientes de la relevancia estratégica de la prensa desplegaron medidas para fortalecer la viabilidad de sostener las empresas periodísticas y, simultáneamente respetando la libertad requerida por el periodismo para cumplir su función, por ejemplo España, Francia, Italia o Alemania. En Argentina se dieron todas las facilidades para contribuir el trabajo de los medios como una actividad esencial durante el aislamiento social preventivo y se incluyó a las empresas periodísticas entre los sectores de la economía que han recibido ayuda del Programa de Asistencia al Trabajo y la Producción. No obstante, algunas empresas no pudieron acceder a esos beneficios para amortiguar el impacto de la crisis, por lo que se ha reclamado por esa situación ante la dramática caída de sus ingresos.
En este contexto es necesario reforzar la comunicación institucional de prevención y servicio en el marco de la pandemia, tal como lo hacen diversos países en esta emergencia, pero en ese sentido en la Argentina debe realizarse con criterio federal, considerando a los medios locales y regionales y toda la diversidad de soportes. Es que la sostenibilidad de la industria periodística es estratégica por su valor institucional, cultural y social.
