Finalmente, el camarista federal Eduardo Freiler fue suspendido en sus funciones por el Consejo de la Magistratura debido a una serie de acusaciones que lo llevarán a enfrentar un Jury de Enjuiciamiento, para determinar su eventual destitución. Entre los cargos que se formulan contra el juez se destacan los de "mal desempeño en sus funciones" y "enriquecimiento ilícito", todo esto en el marco de haber sido un magistrado afín al gobierno kirchnerista y haber estado amparado por la conformación del Consejo de la Magistratura, que tenía al senador sanjuanino Ruperto Godoy como una de las piezas claves de esa protección, antes de que fuera apartado del cargo, por un fallo judicial, en la misma sesión que fue suspendido Freiler.
La situación del Juez era insostenible ya que se le imputan delitos como el de falsear u omitir datos en sus declaraciones patrimoniales juradas y de incrementar su patrimonio con gastos que no guardan correlación con sus ingresos, además de mal desempeño por seguir un patrón de conducta impropio de un juez federal, al comprobarse que dejó de cumplir con obligaciones impositivas hasta acumular una abultada deuda de más de 300.000 pesos. También se lo consigna como un funcionario judicial acostumbrado a recibir prebendas entre terrenos y autos de colección. Se lo acusa además de alegar motivos falsos para obtener licencias con goce de haberes y realizar viajes al extranjero sin vinculación alguna con su función oficial de magistrado, y por ausentarse sin licencia durante días hábiles judiciales de forma grave y reiterada, entre otras tantas irregularidades. Todas ellas demuestran el poco decoro y valores morales de este magistrado que durante todos estos años estuvo al frente de la Sala I de la Cámara, que maneja causas fundamentales como "Hotesur".
Hay que tener en cuenta que el proceso del Consejo no equivale a un juicio penal, ya que solo definirá si hubo o no mal desempeño, para luego resolver la suerte del magistrado. De todas formas, en la Justicia Freiler enfrenta una causa paralela por supuesto enriquecimiento ilícito. El espacio que dejará Freiler es muy codiciado en la Justicia, por lo que ahora habrá que ver quién lo ocupa, al haber muchos interesados en proponer postulantes.
