La señalización horizontal es uno de los recursos vinculados a la seguridad vial que es imprescindible y que no debería faltar en ninguna de las calles céntricas ni en las rutas, ya que está comprobado que incide directamente en la tasa de accidentes. Circular por vías que no están debidamente señalizadas, ni en forma vertical, ni horizontal, constituye un riesgo especialmente en horas de la noche, que es cuando hace más falta contar con puntos de referencia que contribuyan a una circulación más segura.
En las calles céntricas la demarcación horizontal ayuda tanto a los conductores de vehículos como a los peatones. Contar con sendas peatonales también conocidas como "cebras" es sinónimo de seguridad y orden a la hora en que los peatones deben cruzar una esquina, por un lugar autorizado y con resguardo legal.
Por estos días la Municipalidad de la Ciudad de San Juan está procediendo con la demarcación de calles, recientemente repavimentadas y de otras del ejido capitalino en las que la señalización se había borrado. De esta manera, poco a poco, gran parte del centro de San Juan está comenzando a quedar debidamente señalizado, una tarea que el resto de los municipios deberían concretar con cierta frecuencia, tanto en la zona rural como urbana. Es de destacar que la mayoría de las capitales de países del mundo hay una inclinación por mantener las calles en buenas condiciones y debidamente señalizadas, lo que proporciona una buena estética y hace que el tránsito sea más seguro.
En nuestra provincia se trata de una tarea que no sólo debe concretarse en el centro de la ciudad. Hay muchas rutas y caminos de la zona rural y semirrural, en las que es muy necesario que se efectúen trabajos de demarcación horizontal y también se coloque la señalización vertical en puntos críticos. No hay nada más valioso para un conductor que encontrar calles debidamente señalizadas, que ayudan a visualizar mejor la traza del camino evitando accidentes o la triste experiencia de perderse por no saber a dónde dirigirse.
La calidad de la pintura que se utiliza para estos casos, como también el esmero que el personal abocado a esta tarea debe poner en práctica a la hora de hacer el trabajo, marca grandes diferencias al momento de evaluar la duración y la conservación de los trabajos.
Otro problema que se presenta cuando los trabajos de demarcación no están bien realizados, es que pierden su eficiencia y en noches, por ejemplo, de tormentas, viento y lluvia se pierde en las rutas y demás caminos, la referencia de la vía respecto de la banquina o las acequias al lado del camino.
El cuidado de la preservación de la pintura es otro asunto vinculado a la ética y al comportamiento social de grupos. Se hace necesario que entre todos cuidemos las pinturas y que si se observa a alguien dañándola, de inmediato se denuncie, ya que esa señalización es un patrimonio que pertenece a todos y, por lo general, su concreción tiene un elevado costo.
