Ha causado sorpresa en la opinión pública una medida judicial dictada por un magistrado que ordenó la entrega de una copia del registro de las cámaras de seguridad de la zona en la que un redactor de un matutino porteño se habría reunido con una fuente informativa para aportar prueba a una investigación. Es así como el juez federal Marcelo Martínez de Giorgi, que interviene en el caso, ha priorizado conocer como ha hecho su trabajo el periodista Diego Cabot, antes de ir al fondo del supuesto delito revelado.
Un trabajo periodístico de calidad, como es la tarea de investigación, tiene una multiplicidad de fuentes que aportan escritos, fotografías, videos y otros elementos documentales que garantizan una mayor rigurosidad informativa. Es el soporte probatorio que le otorga mayor credibilidad y fortaleza a la investigación del medio, siempre que sean fuentes independientes entre sí.
Es la esencia del artículo 43 de nuestra Carta Magna en lo atinente al secreto de las fuentes de información periodísticas. Sin embargo, el juez en cuestión, dejó en segundo plano los graves hechos denunciados para poner en foco al seguimiento de la nota relacionada con una de las mayores corrupciones conocidas en el país. La inversión de la lógica jurídica ha sido cuestionada por las entidades periodísticas, caso de ADEPA y Fopea y se pondrá a consideración de los organismos internacionales vinculados a la libertad de prensa.
Medidas como la cuestionada no sólo por la jurisprudencia sino por el sentido común, pueden frenar una tarea informativa de investigación ante la posibilidad de criminalizar la labor de un medio e inhibir a los ciudadanos que puedan colaborar con el esclarecimiento de un ilícito con gran repercusión mediática.
Por el contrario, en época de proliferación de noticias falsas y tendenciosas a través de las redes sociales y reporteros inescrupulosos, la calidad informativa se prestigia con calificados trabajadores de prensa y empresas periodísticas que mantienen una línea irreprochable a pesar de recibir presiones económicas y políticas destinadas a torcer el rumbo de los acontecimientos.
Las instituciones deben bregar por resguardar el Estado de derecho y garantizar la democracia instando a la prensa a transparentar los actos de diferentes gobiernos, para lo cual los medios independientes tienen herramientas como las del periodismo de investigación, con la documentación que incluye a las fuentes documentales. El mejor ejemplo fue el histórico caso Watergate que volteó a un gobierno.
