Entre las causas que están generando el intenso calor de estos días en nuestra provincia, los meteorólogos señalan que hay que tener en cuenta que las temperaturas habituales se elevan por la presencia de "zonas de alta presión atmosférica" o "anticiclones de bloqueo", dos factores que hacen que las temperaturas registradas al este de los Andes sean consideradas como extremas, algo que se prevé ocurrirá en varias ocasiones este verano.
Se considera como calor extremo a aquellas temperaturas de verano que son mucho más altas de lo habitual o que tienen, en promedio, condiciones mucho más húmedas. Estas últimas, por sus propias características, suelen hacer parecer que hace más calor del que realmente se percibe, algo que en nuestra provincia es excepcional porque los índices de humedad siempre se mantienen bajos.
Si bien el calor en San Juan comenzó a manifestarse desde hace algunos días de la semana pasada, el inicio de esta semana se ha presentado con mayor intensidad con registros máximos que en promedio están en los 38 grados, ubicando a la provincia y a la región de Cuyo entre las más calurosas del país. Para los próximos días el SMN (Servicio Meteorológico Nacional) con asiento en el aeropuerto de Las Chacritas, prevé que se volverán a repetir los calores extremos, con la misma intensidad atípica de estos últimos días, hasta el fin de semana próximo en que nuevamente habrá un leve descenso.
El calor extremo que se prevé para la temporada 23/24 tiene sus antecedentes en el verano pasado (temporada 22/23) que fue el más cálido en la Argentina desde que hay registros (es decir desde 1960), con una anomalía de temperaturas medias 1,2¦C por encima de los promedios históricos para la temporada estival. Si se toman los diez más cálidos, ocho corresponden a los últimos 20 años. De esta forma, se corrobora la tendencia al calentamiento global que también atraviesa el país.
Todo este comportamiento, como ya se ha señalado, está relacionado con cuestiones cíclicas propias del planeta Tierra en momentos en que se dan fenómenos como el del Niño y de la Niña, pero que ahora tienen la incidencia del calentamiento global y cambio climático que ya han dado muestras de sus efectos en el hemisferio Norte, donde tantos problemas ha provocado, afectando la vida de mucha gente.
En la opinión de científicos y expertos en climatología, las muertes y enfermedades relacionadas con el calor son siempre previsibles, aunque en la última temporada sólo en EEUU murieron aproximadamente 618 personas a causa del calor extremo. De ahí la importancia de prestar mucho cuidado a los efectos que tiene el calor en los niños y en los adultos mayores, víctimas en numerosos casos de deshidratación y de otras patologías vinculadas al calor y los cuidados que hay que implementar para contrarrestar sus efectos. Los primeros calores intensos que toca soportar esta temporada nos obligan a estar atentos a las medidas preventivas para evitar las graves consecuencias que puede tener una insolación en los sectores más vulnerables de la sociedad.
