El problema del arbolado público en nuestra ciudad es histórico, tal vez con más de medio siglo, y se observa en la decrepitud de los ejemplares por carecer de un sistema de riego eficiente. La situación es estructural a partir de un trazado de acequias diseñado para conducir agua y por la pendiente, desde avenida España al Este, la necesidad de utilizar compuertas en cada cuadra para que el líquido elemento llegue a las raíces, en turnos semanales.

Sin embargo en estos días se suceden los taponamientos por hojarasca y residuos, y los desbordes llegan hasta el microcentro. El arbolado lineal sobrelleva también la pérdida de follaje por el despeje del cableado que lo atraviesa, y una sanidad que evidencia fallas en el mantenimiento periódico. En la zona residencial aledaña la situación es peor, donde el vecino es el que riega porque las cunetas están tapadas, borradas y directamente desapareció la dotación de agua.

Ante este panorama sigue congelado el "Proyecto Ejecutivo de Riego del Arbolado Público del Área Metropolitana", licitación 07/2013, para instalar un sistema de riego presurizado del tipo goteo a fin de mejorar la calidad de vida de los ejemplares, ya que por esos conductos pueden recibir los nutrientes o fertilizantes. Ciencia y Tecnología e Hidráulica, iniciadores del plan, adjudicaron el estudio a una empresa especializada y nunca más se supo.

El sistema presurizado es óptimo y San Juan tiene vasta experiencia en los cultivos ya que la eficiencia permite un ahorro del 60% en la dotación de riego y el aprovechamiento del árbol es óptimo por la humedad constante localizada en sus raíces. Además, se evitan los daños ocasionados por el ejemplar que en la búsqueda de humedad avanza levantando veredas y taponando cañerías entre otros daños a los frentistas.

De haberse ejecutado la optimización del riego del arbolado público capitalino ahora se verían los resultados como lo exhibe el área verde de la avenida de Circunvalación con riego presurizado, por ejemplo, sin afectarlo la escasez hídrica. En el caso de nuestra ciudad se podrían sumar otros beneficios, como aprovechar parte de las cunetas inactivas para entubar cableados de servicios que castigan al arbolado y son peligrosos por las características del tendido aéreo, Además de antiestéticos.

Resolver definitivamente el riego del arbolado público en la capital sanjuanina deber ser una prioridad por la importancia de la sombra en este clima desértico donde los espacios verdes son parte de la calidad de vida y del bien común. No debería seguir postergada la obra, la inversión la justifica.