Apenas pisado el último peldaño de la escalera que lleva al primer piso, el aroma a galletas horneadas funcionaba como un certero llamador. Lo curioso, es que esas oleadas de jengibre y vainilla no provenían de una panadería, ni siquiera de una casa de familia; sino de una de las aulas-taller del Museo de Bellas Artes Franklin Rawson, donde se llevaba a cabo Delicias Alemanas: Taller de aproximación a la cocina alemana y cuentos tradicionales. Se trata del regreso de una exitosa propuesta co-organizada entre el Museo y la Fundación Instituto Alemán, que en el marco del receso invernal repetirá el próximo martes (ver aparte). Cruzando la puerta, pequeños de entre 6 y 12 años hacían su magia, o mejor dicho, su propia obra de arte: amasar y cortar con formas variadas esas galletas que disfrutarían un rato después, a pesar de la ansiedad de algunos que clamaban “¿Ya podemos comer las galletas?’

Preparar galletas, con las indicaciones en español y en alemán, fue la actividad central del taller. (FOTO Daniel Arias)

“Con el Museo hemos trabajado muchas veces y el director tuvo la idea de repetir este taller que siempre ha salido muy bien, porque los chicos aprenden jugando. De hecho los sábados tenemos en el Instituto un taller de este tipo’, dijo a DIARIO DE CUYO la directora del Instituto, Karin Braun, que especialmente se ocupó de hornear las galletitas -un clásico de la Navidad alemana- y devolverlas a sus impacientes cocineros, trabajando codo a codo con las profes Nazarena y Romina.

A la par, los niños disponían de unas fotocopias con la receta en español y alemán, que leyeron y repitieron varias veces. Y es que la idea es introducirlos al idioma y a la cultura de ese país de manera lúdica; por eso también vieron un video del conocido cuento de los hermanos Grimm, “Los músicos de Bremen’, que sirvió para aprender otras palabras como katze (gato), esel (burro) o hahn (gallo). Y del mismo modo, hojitas en mano, hasta pudieron cantar una canción en alemán. “¡Es un poco difícil!’, sonreía uno de los niños, tratando de ir a tiempo con la letra y la música.

Danke (gracias) fue la palabra más repetida hacia el final, cuando tras una entretenida tarde, los chicos dejaron el Museo para volver a sus hogares, con una linda experiencia más para recordar.

 

Karin horneando galletas, los chicos amasando, viendo cuentos y experimentando un nuevo idioma fueron postales de una linda jornada. Infaltable, la foto de todos junto al director del Museo y a la directora y profes del Instituto Alemán.

> PROTAGONISTAS

> Joaquín
Tiene 9 años y va al colegio Los Olivos. Lo que más le gustó, contó, fue amasar las galletas. Y aunque las palabras en alemán le parecieron “un poco difíciles’, salió aprendiendo algunas.

> Justina
Tiene 9 años y va al colegio Medalla Milagrosa. También le pareció “un poco difícil de entender’ el alemán, pero dijo que le gustó la propuesta y que su parte favorita fue hacer galletas.

> Felipe
Tiene 11 años y va a la escuela San Luis. Ya había asistido a un par de talleres en el Museo y va por más. Su parte favorita fue la del cuento. “Es un poquito raro, pero lindo’, dijo del idioma.

> DATO
Delicias alemanas. Para niños y niñas de 6 a 12 años. Repite martes 16, a las 17 hs. Gratis, cupo limitado. Informes: 4200598 (int. 106), de martes a domingo, de 12 a 20 hs. Museo de Bellas Artes Franklin Rawson.