A trece días de asumir un segundo mandato como presidente de los EEUU, Donald Trump volvió a inquietar al mundo. El líder republicano que tomará el control de la Casa Blanca el 20 de enero próximo, no descartó el martes el uso de la coerción militar o económica para conseguir que EEUU obtenga el control del Canal de Panamá y adquiera Groenlandia.

En una larga comparecencia ante periodistas, en la que se le preguntó si podía asegurar al mundo que no recurriría a la coerción militar o económica para tratar de hacerse con el control de Groenlandia o el Canal, Trump respondió: ‘No, no puedo asegurártelo en ninguno de esos dos, pero puedo decir esto, los necesitamos para seguridad económica’, señaló y explicó: “Podría ser que tengamos que hacer algo. El Canal de Panamá es vital para nuestro país y necesitamos Groenlandia por motivos de seguridad nacional”, dijo al respecto. “El Canal de Panamá está siendo operado por China. Se lo entregamos a Panamá, no a China, y han abusado de ese regalo”, advirtió. Las autoridades panameñas no hicieron comentarios de inmediato. El presidente, José Raúl Mulino, había rechazado antes la idea de devolver el canal a EEUU, que fue su propietario antes de 1999.

La extraordinaria declaración la hizo a poco de jurar su cargo y es parte de una agenda expansionista que ha promovido desde que ganó las elecciones del 5 de noviembre.

Trump también planteó la idea de convertir a Canadá en un estado de EEUU, dijo que exigiría un gasto en defensa mucho mayor a los aliados de la OTAN y prometió cambiar el nombre del Golfo de México por el de Golfo de EEUU. E imponer importantes aranceles a México y Canadá.

El magnate republicano también criticó el gasto estadounidense en productos canadienses y el apoyo militar a Canadá, afirmando que su país no obtiene ningún beneficio de ello, y calificó la frontera entre ambas naciones de “línea trazada artificialmente”. Y sugirió que impondría aranceles a Dinamarca si se resiste a su oferta de comprar Groenlandia, que dijo es vital para la seguridad nacional de EEUU. Poco antes de los comentarios de Trump, su hijo Don Jr. llegó a Groenlandia para una visita privada.

Dinamarca ha dicho que la isla ártica de Groenlandia de 57 mil habitantes, una parte autónoma de su reino, no está en venta. Nuuk, la capital y ciudad más poblada del territorio autónomo, es desde hace décadas un enclave estratégico para EEUU por su ubicación entre el océano Atlántico Norte y el Ártico, la presencia de la base militar de Thule, las vastas reservas de minerales y recursos, y las nuevas rutas de comercio global que la rodean, entre otras razones. “Por motivos de Seguridad Nacional y Libertad en todo el mundo, EEUU considera que la propiedad y el control de Groenlandia son una necesidad absoluta”, cerró.