Temperley dio el gran golpe en lo que va de la Copa Argentina. Eliminó a River Plate en la definición por penales (5-4) luego del 1-1 con que terminó el tiempo reglamentario. Justamente el gol del empate del equipo del Sur bonaerense llegó cuando se jugaba el descuento, nada menos que con una espectacular chilena de Martínez. Después en los penales, el poco efectivo de Armani en esa definición no paró ninguno (el único fallado por Temperley fue desviado), todo lo contrario del arquero rival Rago, que se atajó dos y terminó siendo el héroe.

El primer tiempo terminó cerrando un cúmulo de imprecisiones y con pocas llegadas netas sobre los arcos. River se adueñó de la pelota pero cuando llegó a los metros finales su ataque se diluyó. Temperley se preocupó especialmente en la marca y sus pretensiones ofensivas se basaron en los contragolpes. Los dos tuvieron oportunidades pero fallaron en la definición.

En octavos de final, Temperley jugará ante Mitre de Sgo. del Estero, equipo que milita en la Primera Nacional.

El complemento arrancó parecido pero a los 6′ se dio una jugada que cambió todo el panorama. Barco, que había entrado por Fernández, ejecutó de manera notable un tiro libre y la mandó al fondo del arco. El gol despertó a Temperley que terminó acosando a River. Por eso, en el alargue, llegó al empate con ese golazo de Martínez. Después, en los penales, es historia conocida para River, porque falló otra vez.

Opaco. Aliendro, de River, intenta progresar. El partido no alcanzó un buen nivel y las grandes emociones se dieron recién en los penales.
La intimidad del vestuario “Millo”
La intimidad del vestuario de River en la previa. A la espera de los jugadores, los encargados de la utilería dejaron todo listo horas antes. ¿Con qué se alimentan antes del partido? En las mesas aparecieron frutas y varias golosinas (contenido alto en azúcar para brindar energía), y barras proteicas acompañadas de frutos secos. Además, botellas de agua para hidratarse y chicles para refrescarse. Y los utileros esperan con música para levantar el ambiente. ¿Qué escuchan los jugadores? “De todo”, fue la respuesta.