En 2019, Joaquin Phoenix sorprendió al mundo con su interpretación de Arthur Fleck, el perturbado joven que da origen a El Guasón, en una producción que recaudó 1.079 mil millones de dólares transformándose en el film clasificación R más taquillero de la historia en aquel momento. Varios años pasaron y, por fin, la esperada secuela arribará a las carteleras locales como el único estreno de la provincia en el marco de su debut en todas las salas del país, en formato musical.

Tras su lanzamiento en el Festival de Venecia hace poco más de un mes, en esta esperada secuela Folie à Deux – conocido como trastorno psicótico compartido -, Phoenix vuelve a ponerse el traje del personaje que le valió el Oscar a Mejor Actor por su desempeño, al igual que a Todd Phillips en dirección, pero esta vez las miradas también están puesta en Lady Gaga como Harley Queen, una de las villanas del universo DC. con quien hará match El Guasón.

Aquí, el frustrado payaso que tiene en vilo a los habitantes de Ciudad Gótica con su falsa sonrisa realizada con lápiz labial – si bien, todavía no se presenta como el archienemigo de Batman- dejará de actuar en solitario.

Confinado en el hospital psiquiátrico de Arkham, donde terminó el primer largometraje y mientras enfrenta el juicio por sus acciones llevadas a cabo en la primera entrega, él entablará una relación amorosa con Harley – figura creada por Paul Dini y Bruce Timm en 1992- a quien transmitirá su psicosis y sus delirios.

Planeando siniestras ideas con su nueva compañera, encarnada por la famosa cantante estadounidense, Arthur continúa con su lucha interna y también descubre su conexión con la música, un aspecto que estuvo latente en él y surge como una parte central de su papel desde que es encerrado y maltratado. Este, sin dudas, es un toque novedoso para la narrativa que explora cómo influye este arte en la trastornada cabeza de Arthur y su alter ego El Guasón, como una propuesta original dentro del género de superhéroes.

En definitiva, a lo largo de dos horas veinte, este drama muestra a un Arthur internado junto a Harley con los matices de los bloques en los que ambos son intérpretes de varios números musicales, una pareja que, al parecer, promete deslumbrar.