Demasiado castigo, poco premio. Setenta minutos casi perfectos en el plan del partido terminaron en nada cuando se elevó el paraguayo Avalos en un anticipo perfecto para romperle el arco a Borgogno. Era el principio del fin, la concreción de una nueva caída para este San Martín que mostró otro orden, más concentración, pero aún así volvió a quedarse con las manos vacías en la fecha 13 del Apertura de la Liga Profesional. Una derrota por 2-0 que se sintió en el Verdinegro porque con un esquema más compacto en el medio, sin tanto juego y con más solidez, San Martín maniató al líder de la Zona B a lo largo de todo el primer tiempo y en la mitad del complemento, pero las individualidades tienen su peso propio y Avalos resolvió lo que parecía complejo con un terrible cabezazo que se le clavó en el ángulo a Borgogno. Y luego, con una tremenda definición cruzada que resolvió la noche de Avellaneda.


Lo mejor de San Martín se vio en la primera parte. Con Portillo e Iacobellis bien abiertos más el trío González, Watson y Jaurena, se acomodó en la cancha para dejarlo venir a Independiente cerrandole espacios. Concentrado todo San Martín, al Rojo no le sobraron ideas. Sistemáticamente nunca pudo desacomodar el esquema sanjuanino y solo un error a los 12′ casi termina en gol cuando Millán
no resolvió un error de Cáseres en la salida. A todo lo bueno defensivamente, San Martín le debía lo ofensivo y por ese mismo plan de partido dependía de llegadas aisladas y remates de media distancia. A los 15′ Jaurena probó y respondió bien Rey.
El clásico contra Godoy Cruz del domingo próximo podría ir a las 16 por recomendación policial.
En el complemento, en los primeros 20 minutos, nada cambió. Independiente quería, San Martín aguantaba bien. No habían espacios, no tenían mano a mano peligrosos, pero claro a los 23′ llegó el corner de Galdames y Avalos anticipó en el primer palo. Golazo. Nació otro partido porque San Martín tuvo que abrirse y con esos espacios, el Rojo fue a liquidarlo. Llegó en un par de ocasiones pero a los 37′ Avalos sacó el manual del goleador para cruzar el zurdazo ante la salida de Borgogno y puso el 2-0 lapidario.
San Martín hizo lo que pudo. Jugó un partido del medio para atrás casi sin errores en 70 minutos, pero la categoría de Independiente terminó siendo decisiva. Con lo que mostró en la primera parte, no alcanza todavía en San Martín. Las respuestas a este presente no aparecen y el futuro se complica cada fecha.