Esta noche, a las 21.30 en un Río de Janeiro convulsionado por sus característicos festejos anuales del Carnaval; Racing Club visitará al Botafogo en el partido revancha de la final de la Supercopa Sudamericana. La Academia, que ganó en el partido de ida jugado en Avellaneda por 2 a 0, con goles de Luciano Vietto y Adrián Martínez, intentará mantener la ventaja para sumar a su vitrina otra copa internacional.

El encuentro se disputará en el estadio Nilton Santos, inaugurado para los Juegos Olímpicos de 2016. Ambos equipos llegan al partido decisivo arrastrando algunas dudas. Gustavo Costas, técnico del equipo argentino, que confirmará el equipo antes del inicio del encuentro, haría una sola variante con respecto al equipo que ganó la semana pasada en El Cilindro. Sería el ingreso de Matías Zaracho por Vietto, quien se ha recuperado de la lesión que obligó su cambio en el primer tiempo, pero podría ser arriesgado ponerlo desde el minuto inicial. Por lo demás, mantendrá la formación con línea de tres stopper en el fondo, cuatro volantes -con dos laterales, Martiarena y Rojas que eventualmente puede retroceder para dar una mano en las pelotas paradas- y tres delanteros, siendo el más retrasado Zaracho o Vietto.

Por el lado del Botafogo, quien es su técnico interino Claudio Cacapa decidió el regreso de Ricardo a la defensa en reemplazo de Danilo Barbosa, mientras que el resto será el mismo equipo que perdió en el primer partido.

El Fogao está obligado a ganar por dos goles para forzar a un tiempo suplementario de 30 minutos, divididos en dos tiempos de 15, cada uno. Y de mantenerse la igualdad, el campeón se decidirá por penales.

A Racing le alcanza con empatar o perder por un tanto, porque el primer criterio de desempate es la diferencia de gol.