En un momento de furor por las bicisendas que parece haber disminuido, en varios departamentos de la provincia se construyeron estas vías de circulación pensadas para el público que utiliza la bicicleta a diario como medio de transporte u ocasionalmente para realizar ejercicios físico. Lógicamente, en los departamentos del Gran San Juan fue donde más proliferó este concepto y hubo algunas bicisendas que marcaron una tendencia de este recurso urbanístico que prometía un mayor desarrollo.

Pero, no solo que las bicisendas trazadas no crecieron en sus recorridos, sino que se han ido deteriorando a tal punto que la seguridad que ofrecían no es tal al carecer de una adecuada demarcación o delimitación.

Entre las vías que están en mejores condiciones se destaca la que está sobre el costado Este de la calle Las Heras, que va desde la Avenida Córdoba hasta la Avenida Libertador General San Martín. Otra que está bien delimitada es la del Conector Sur, de Capital hacia Rawson.

La bicisenda de la calle 25 de Mayo, que está junto al Parque de Mayo tiene numerosos inconvenientes que hacen que, muchas veces, los ciclistas prefieran ir por la calle. Esta misma vía de Urquiza hasta Paula Albarracín de Sarmiento está en plena etapa de remodelación, por lo que habrá que esperar que sucede una vez terminado los trabajos.

Entre las bicisendas más populares está la del denominado Circuito del Sol que conduce hasta el Dique de Ullum. Pero esta vía que en un principio fue proyectada para el gran número de ciclistas que eligen ese destino, también presenta algunos inconvenientes que hacen que no se la utilice como corresponde y que se prefiera circular por la ruta a pesar del peligro que implica.

Hay que volver a promover el uso de estas vías y acondicionarlas para un tránsito más intensivo. También hay que proyectar mayores conexiones a fin de que resulte funcional y más cómodo circular por ellas, interconectándolas para que los ciclistas tengan la posibilidad de llegar a la ciudad Capital y a otros puntos del Gran San Juan utilizando este recurso.

En los departamentos más alejados también existe la necesidad de contar con estas vías, especialmente por la cantidad de bicicletas en circulación y el crecimiento de un parque automotor que hace que las calles sean peligrosas, una situación que es reflejada por la crónica diaria de accidentes en la vía pública.