En la mañana de hoy en la Argentina se disputará la 116 edición de la Milán – San Remo, primera de las cinco monumentos que se corren todos los años, que tiene 289 kilómetros de perfil llano.

Y, como viene ocurriendo en las últimas temporadas el mayor atractivo de ‘La Classicissima’ es ver si Tadej Pogacar podrá o no vencer en Via Roma por primera vez. Este monumento se le resiste, y es que, es probablemente el único en el que el esloveno no depende de sus fuerzas para celebrar.

Puede estar en la mejor forma de su vida, puede que todo salga perfecto desde la estrategia, pero el terreno condiciona al actual campeón del mundo, al que le será muy difícil marcar diferencia a rivales de mucho peso y de gran presente, como el neerlandés Mathieu van der Poel y el belga Jasper Philipsen, entre otros.