En la previa, Portugal aparecía como el favorito. No sólo porque en este torneo se había mostrado mejor sino porque es un rival al que Argentina nunca le pudo ganar en esta categoría. Y ayer el equipo lusitano estuvo ahí nomás de perder todo ese favoritismo. Lo salvó ese primer tiempo que terminó ganándolo 5-1 ante una sorprendida Selección Argentina que careció de reacción para torcer la historia. Al final el partido terminó 5-4 en favor de Portugal, que hoy jugará la final del Campeonato Mundial de hockey sobre patines en la categoría Sub/19 de los varones. Mientras que los chicos albicelestes estarán presentándose hoy luchando por la medalla de bronce.

La semifinal de ayer fue rara. No porque su desarrollo haya sido tan cambiante y disímil sino porque tuvo pasajes que se rodearon de altibajos pronunciados. Y en ese sube y baja, Portugal fue práctico y efectivo. Golpeó en momentos clave. Como será que a los 30 segundos tuvo un libre que desperdició. Pero como el panorama estaba claro apenas pasaron dos minutos de eso y el equipo lusitano se puso en ventaja (bombazo de Oliveira). Y un ratito después fue el turno del tiro fuerte de Azevedo. “Cacu” Velázquez no pudo ante ambos disparos y Portugal ya ganaba 2-0. Descontó “Tomy” López casi con rabia, pero el campeón europeo no dejó pasar nada y metió tres contras mortíferas para irse al descanso ganando 5-1.

Con ese panorama lógicamente parecía cosa juzgada, pero apareció la vergüenza deportiva y las ganas en el equipo de “Juanma” Garcés para llevarse por delante a Portugal. Claro, a esas cualidades anímicas le agregó un hockey veloz, preciso y efectivo. Está claro que tres jugadores fueron esenciales en esa levantada: Briggs, López y Marzonetto. El primero siendo el alma del equipo, el segundo la cuota de picardía y el tercero la efectividad plena.

Entonces empezaron a llegar los descuentos. Y Portugal a preocuparse. Inclusive el cuarto tanto argentino llegó cuando Velázquez estaba afuera y el equipo atacaba con cinco de campo.

Una lástima. Los chicos argentinos reaccionaron pero les faltó tiempo. De todo se aprende, dicen. Y éstos jóvenes demostraron que tienen ganas de aprender. Por eso hoy buscarán recuperación.