Fuerzas israelíes continuaron ayer con bombardeos sobre Líbano, donde dejaron un saldo de al menos medio centenar de muertos, mientras que también atacaron posiciones de los hutíes en Yemen. Sucedió dos días después de que un ataque terminó con la vida del líder del movimiento islamista Hezbollah, Hassan Nasrallah. La serie de ataques y la suma de frentes de conflicto para Jeusalén hizo temer que el conflicto se generalice en Medio Oriente, con la posible intervención de los EEUU y de Irán en forma más directa.
El Ministerio de Salud de Líbano informó que al menos 14 médicos habrían muerto en ataques aéreos en los últimos dos días. Por otro lado, el gobierno israelí anunció que bombardeó objetivos hutíes en Yemen ayer, en respuesta al lanzamiento de misiles contra Israel en los últimos dos días por parte de estos militantes, alineados con Irán, lo que marca otro frente en el conflicto actual en Medio Oriente.

