FOTOS GENTILEZA PRENSA MUNICIPALIDAD DE JÁCHAL
Una vez más, con la misma pasión de todos los años, el pueblo jachallero celebró la culminación de la Fiesta Nacional de la Tradición exaltando el sentimiento de argentinidad que proclama el poema y el ideario de Buenaventura Luna. Con el broche de oro de dos semanas de festejos y espectáculos, la escenificación de el Fogón de Los Arrieros despertó un cúmulo de emociones ante más de 30 mil espectadores. Si bien, en su mayoría, el público provenía de diferentes distritos locales, también hubo visitantes de San Luis, Córdoba, La Rioja, Salta, Santa Cruz, Tierra del Fuego, Buenos Aires, La Pampa, Neuquén y otras ciudades del país. El escenario Tito Capdevila estuvo al mando de los presentadores conocidos como Mario Denise Echegaray junto a Jesica Muñoz, Mariela Mesías y Rulo Molina y después Pascual Recabarren, junto a Mario Echegaray. Este último fue quien dio una conmovedora arenga en la apertura de los espectáculos, acompañado por los fuegos artificiales. ‘Jáchal es un pedazo de tierra en el universo, pero tiene todo el universo metido en su interior. Con todo el ayer, con todo el presente y sobre todo, con todo el porvenir en sus pupilas (…) Porque la voz del pueblo es siempre el origen del pájaro de fuego resucitando…’ y con estas palabras, dio paso a los recitales y presentaciones de los artistas y ballet de danza.
Lo destacable de esta edición, a diferencia de anteriores oportunidades, es que la puesta en escena contó con un elenco bastante numeroso. Cerca de 198 intérpretes montados a caballo, más unas 20 más representando a diferentes etnias de pueblos originarios, pastores, caudillos, caciques, entre otros roles, todos coordinados por la Delegación Regional de Gauchos de Jáchal y sus 33 agrupaciones tradicionalistas locales. Sin dudas, uno de los elementos novedosos fue la proyección mapping en los cerros. Es la primera vez que se incorpora dentro de la puesta y resultó un efecto que aportó atractivo visual al espectáculo. Sobre la superficie rocosa, emulando la Cordillera de los Andes, aparecían imágenes de soldados, jinetes atravesando el desierto, más un cóndor gigante sobrevolando toda la zona. Además, en el fogón participó también el intendente Matías Espejo, quien descendió de los cerros junto a los soldados que acompañaban a San Martín (interpretado por Alejandro García). Fue el momento de mayor clímax, porque cuando desfiló por la pasarela vallada, junto Belgrano (Diego Ontiveros) y los demás personajes, los espectadores -algunos no pudieron contenerse las lágrimas- victoreaban y saludaban eufóricos con sus banderas celeste y blanco. Por otro lado, por primera vez, los gauchos de las agrupaciones, usaron las brasas que quedaron ardiendo del fogón para un gran asado colectivo y cuando se interpretó el Himno Nacional, tuvo como voces protagónicas del grupo Los de Jáchal. Sentido de pertenencia, cultura, identidad y el amor por la tierra donde se nace y se cría, fueron los valores más caros que se transmitieron en sintonía con el mensaje fundamental del poema de Dojorti: la unidad nacional y de hermandad de todos los pueblos que habitan el suelo argentino y la Patria Grande Latinoamericana.