El fútbol es la vida misma. En esa montaña rusa de sentimientos, de momentos, de situaciones, todo pasa. Todo se transforma y para el cordobés Maximiliano Ezequiel Gutiérrez, este domingo será más que especial en sus 27 años. Es que volverá a su Córdoba para enfrentar a Racing en Nueva Italia con la camiseta de San Martín, recordando tal vez aquellos clásicos que jugó, disfrutó y muchos ganó con los colores de su amado Instituto. Es que Maxi hizo todas las inferiores en La Gloria. De familia hincha de Instituto, vecino del predio de entrenamientos, Maxi se crió amando esos colores, pero hace 10 años atrás, el momento más cruel de su incipiente carrera se hizo presente. Instituto lo dejó libre y el mundo se le vino encima. Pero la vida enseña y a los golpes, porque Gutiérrez tomó aire, sacó pecho y se sinceró con su papá Claudio: “Voy a trabajar”. Esa fue la frase y ese trabajo frenó el fútbol por más de un año y medio hasta que Sarmiento de Leones, en el interior cordobés, le abrió las puertas para el regreso. Volvió pero en el medio ya era papá y todo era distinto. Empezó de cero, fue madurando y después de los trabajos de albañil y de pintor, Maxi volvió a su gran amor. Llegó luego Argentino de Monte Maíz para el Federal A y ahí, la rompió. Tanto que apareció en la mira de Atlético San Martín y hoy, con 13 partidos en 18 fechas, Gutiérrez es clave en el sistema verdinegro que manda en la Primera Nacional.
Gutiérrez hizo todas sus inferiores en Instituto, donde estuvo a punto de debutar. Pero no se le dio. Pero “a punto” de verdad: fue al banco en un partido de Copa Argentina ante Estudiantes de Caseros (en 2014) y entrenó casi dos años con el plantel profesional. “Cuando estaba por cumplir 17 años fui por primera vez al banco para jugar Copa Argentina ante Estudiantes de Caseros. No se me dio la chance de entrar. Viajaba, iba al banco, y no se me daba la chance. Hasta que quedé libre y paré un año, dejé de jugar. Justo fui papá y me tocó salir a trabajar”, se sincera. “Cuando me dejaron libre fue algo muy duro. Porque en mi familia somos todos hinchas de Instituto. Fue difícil en lo personal, me jugó un poco en contra la cabeza. Dejé de jugar, hasta que me salió la posibilidad de volver y arrancar en Sarmiento de Leones. Ese año y medio me la rebuscaba como albañil con mi viejo o trabajos que salían. Hubo un tiempo que pintaba con mi tío. Buscaba cualquier trabajo para poder sumar una moneda. La paternidad me obligó a madurar”.
Ahora, disfruta de San Martín y de San Juan: “Fue mi mejor decisión. Llegué a un club que te brinda todo, que me recibió más que bien y en un grupo que es sensacional. Me integraron, me hacen sentir útil al equipo y creo que he podido adaptarme rápido a todo. Estoy solo en San Juan, mi familia está en Córdoba. Tengo una nena y además está allá mi novia. Seguramente todos van a estar en Racing para apoyarme porque este lindo momento es en gran parte por ellos”. En lo deportivo, Gutiérrez sabe que es un lindo presente pero mira al futuro: “Estamos arriba y creo que San Martín hizo los méritos para ocupar ese lugar pero la Primera Nacional es muy competitiva y queda demasiado. Hay que ir partido a partido, sabiendo que la ilusión es la misma”.
Equipo repetido
Sin dudas ni misterios, San Martín quedó definido para jugar mañana a las 15 contra Racing en Córdoba por la fecha 19 de la Zona A. Matías Borgogno en el arco; Alejandro Molina, Cáseres, Sienra y Dante Álvarez en defensa; Nicolás Pelaitay y Santiago López García en el medio; Maxi Casa, Sebastián González y Maxi Gutiérrez más adelantados y de punta, Federico González. La fecha 19 comenzará hoy con tres partidos. Desde las 15, Tristán Suárez será local de Agropecuario de Carlos Casares; a las 15,10 San Miguel recibirá a Quilmes y a las 15,20 All Boys se medirá con Atlanta en el Interzonal.