No les importó levantarse mucho más temprano de lo acostumbrado un día sábado. La cita era a las 8,30 y llegaron puntualmente movilizados por el entusiasmo de ser protagonistas por primera vez de un evento de adultos. Fueron los niños que ayer participaron en el ‘Maratón Juntas contra el Cáncer de Mama’ que en esta edición incluyó la categoría kids. Unos 300 chicos corrieron sin la compañías de sus padres y previamente a la instancia para adultos que reunió a más de 4.000 participantes.

El locutor sólo una vez tuvo que invitar a los chicos a ubicarse detrás del arco de largada. Estaban tan entusiasmados que no necesitaron que les repitieran el pedido.

Entusiasmo. Unos 300 chicos participaron de primer Maratón Kids contra el cáncer de mama que se realizó ayer.

Pese a las recomendaciones de correr despacio o de caminar para evitar caídas, salieron corriendo a toda velocidad, recorriendo en menos de 2 minutos los 500 metros de distancia que incluyó esta categoría. Y fue ante el aliento de sus familias que se agolparon a orillas de la calle para verlos en acción.

Multitud. Más de 4.000 personas corrieron contra el cáncer de mama.

Pero, el protagonismo de los chicos arrancó desde el inicio de la concentración en el Paseo de Las Palmeras, en el Parque de Mayo. Llegaron lookeados con las remeras rosadas que obtuvieron al momento de inscribirse más vinchas, muñequeras, gorras y pañuelos del mismo tono. Incluso algunos hasta adornaron con globos rosados sus bicis para participar del maratón.

Acción. Los chicos aprendieron a realizar RCP antes de correr el maratón.

Durante la previa, además, participaron en las diferentes actividades recreativas que preparó la organización para entretenerlos. Muchos hicieron fila para aprender a realizar los ejercicio de RCP, practicando con muñecos; mientras otros se pusieron batas y cubreboca para caracterizarse de médico y tomarse fotos en una fotocabina. En tanto que los más energéticos demostraron su habilidad para el baile o para jugar al ‘pato al agua, pato a tierra’, junto a una pareja de payasos que se encargó de entretenerlos.

Y, pese a que participaron de todas estas actividades y que corrieron los 500 metros, muchos de los chicos volvió a correr junto a sus padres en la instancia para adultos que quedó desbordada por la participación de más de 4.000 personas.

Los adultos también largaron caminando o trotando lento porque era imposible correr y avanzar entre la segunda marea rosa.