Hasta marzo de 2025, los trabajadores que se desempeñan tanto en la actividad privada como en el Estado y que están comprendidos entre los 50 y 59 años, para el caso de las mujeres; y entre 55 y 64 años, para los hombres, sin que reúnan la cantidad mínima de aportes correspondientes a los 30 años de antigüedad, pueden solicitar la jubilación pagando los períodos faltantes a través de una moratoria previsional. Se trata de una muy buena posibilidad para anticipar un retiro que en promedio se adelantará entre 5 y 10 años, permitiendo que esas personas puedan comenzar a percibir un haber mensual en tanto desarrollan alguna otra actividad para acercar recursos a sus respectivas economías familiares. Por otra parte libera a muchas empresas y organismos oficiales de contar con personal que se encuentra en la etapa pre-jubilatoria, en la que suelen darse casos de una disminución del rendimiento por diversas causas, entre ellas la falta de motivación o incentivos.
Hay que tener en cuenta que para jubilarse en la Argentina, en condiciones normales, es necesario tener en cuenta los años de trabajo con aportes y la edad de las personas. Para las mujeres, es de 60 años y para los hombres, de 65. En ambos casos, tienen que haber aportado durante 30 años dentro de lo que se denomina un empleo en blanco. Esto es así porque muchas personas que forman parte de la economía informal, al ingresar a un empleo formal pueden contar con la edad necesaria, no llegan a cumplir con la totalidad de los requerimientos por no tener la cantidad suficiente de años de aportes, los que les impide gestionar la jubilación ante el ANSES.
En ese sentido, la moratoria previsional en vigencia permite adquirir los años que hagan falta para jubilarse. El pago equivale al haber mínimo y consiste en la adquisición de la jubilación, pero con unos descuentos, los cuales son para compensar los años sin aporte.
Esta norma está en vigencia desde marzo de 2023, en que fue implementada por el Gobierno nacional para permitir a todas aquellas personas en edad jubilatoria que no tenían los 30 años de aportes poder acceder a la jubilación promoviendo un recambio generacional que en muchas áreas es muy conveniente.
Si bien este sistema va a ocasionar un incremento del número de jubilaciones, se considera que los beneficios serán mayores dentro de la política que se pretende impulsar con las nuevas leyes laborales entre las que figura la creación del seguro que reemplazará al sistema indemnizatorio. Además hay mucha gente que está esperando una oportunidad como ésta para retirarse y dedicarse a actividades propias como emprendedores o trabajadores autónomos.