Nueva gestión de Gobierno, nueva modalidad, nueva fecha, nuevo cronograma y nuevo escenario. La edición 2024 de la Fiesta Nacional del Sol representó un desafío. Y lo superó. Tras finalizar el evento más importante de San Juan, con una serie de reformas, hay más puntos para destacar que para criticar, y que van más allá del éxito de haber contado con 60 espónsores privados para lograr la sustentabilidad que se buscó darle este año.
Lo positivo de la FNS se hizo sentir desde afuera. El ingreso al Velódromo Vicente Chancay y al Estadio del Bicentenario se hizo en tiempo récord comparado con otras ediciones y escenarios. Los vehículos demoraron menos de 5 minutos en ingresar gracias a la cantidad de accesos y al operativo de control y orden que realizó la Policía de San Juan. A esto se sumó el despliegue estratégico de los colectivos de la RedTulum, que transportaron gratis a la gente hasta los predios y que también se realizó con orden, rapidez y seguridad tanto para el tránsito como para los peatones.
Ya adentro de la Feria se destacó la variedad de stands, tanto del Gobierno como de la parte privada, que ofrecieron numerosas actividades interactivas para entretener a los visitantes. De esta manera, toda la familia pudo divertiste en la FNS. Y si se trata de entretenimiento y diversión, los 4 escenarios alternativos hicieron un gran aporte. No sólo por darle la oportunidad a la gente que no pudo ingresar a los shows nacionales de disfrutar también de buena música, sino también por darle espacio a más de 60 artistas provinciales de mostrar su arte.
En cuanto a los servicios, también resultó positivo la seguridad dentro de la Feria y que incluyó un plus. Los cientos de policías y personal de prevención estuvieron preparados para responder todas las consultas de la gente y de guiarla, sobresaliendo el buen trato.
También es importante destacar que se instalaron islas con una importante cantidad de baños químicos cada una (para hombres, mujeres y personas con discapacidad) y que en esta edición también incluyeron una variante, pensada para la salud de los usuarios. En medio de las islas colocaron una doble fila de bachas para poder lavarse las manos tras ingresar al sanitario.
Otro punto destacable fue el rápido acceso al Estadio del Bicentenario para disfrutar de los shows nacionales, debido a un importante número de ingresos y a la velocidad con el que el personal se encargó de controlar las entradas.
Por último, cabe mencionar la oferta gastronómica por dos razones. Por un lado la cantidad de food trucks y patios de comida que ofrecieron gran variedad de platos y con precios para todos los bolsillos. Y, por otro, los vendedores ambulantes que también tuvieron su espacio en la Feria para vender desde caramelos hasta semitas caseras.
Aspectos a mejorar
La nueva FNS también tuvo algunos puntos que se pueden mejorar para próximas ediciones, en caso de que se vuelva a realizar en el Velódromo Vicente Chancay y el Estadio del Bicentenario. Uno de ellos es establecer un circuito de recorrido claro, ya que en esta ocasión faltó organización en este aspecto. La gente no sabía por dónde comenzar a recorrerla y en varios sectores se topó con vallas que le impidieron acceder a algunos stands, viéndose obligada a dar una vuelta por otra zona para poder hacerlo. También faltó cartelería con información orientadora para el público.
Otro aspecto a mejorar es la escasa iluminación en algunas zonas de estacionamiento y señalización. Si bien las salidas estuvieron bien señalizadas, no así el camino que se debía recorrer para llegar hasta alguna de ellas. A esto se sumó la falta de personal en las zonas de estacionamiento para guiar la salida.