El abogado defensor del oficial Ricardo Rodríguez, Martín Zuleta, aseguró ayer que no acordará ninguna salida alternativa (como un juicio abreviado) y que llevará a su cliente a un juicio oral y público, convencido de que en esa instancia demostrará que no tuvo intención de matar al chofer riojano Federico Gastón Orihuela (37), tras una alocada persecución de unos 20 km por la Ruta 510, en Valle Fértil, la noche del pasado 9 de febrero. Y entre las pruebas que sostendrá en el debate a favor de su cliente, sobresale una: “Las concentraciones características con la presencia de residuos de deflagración de arma de fuego en ambas manos”, del chofer asesinado.
“En una de sus declaraciones el oficial Rodríguez aseguró que vio movimientos compatibles con la manipulación y las detonaciones de un arma de fuego por parte del chofer. Y si bien esa arma no se secuestró, no es casualidad ni un invento de esta Defensa que en las manos del camionero encontraran pólvora, restos de desflagración de un arma de fuego. Además, en su sangre encontraron restos de alcohol y estupefacientes”, dijo Zuleta.
Y agregó: “Esa es una de las evidencias de que el oficial en todo momento obró en función de lo que le exigía su deber, actuó dentro de los límites que le impone la ley y el hecho no es punible. Esa noche el chofer pasó en rojo, puso en peligro la vida de quienes circulaban en sentido contrario, y el oficial Rodríguez sólo buscó parar su marcha, jamás quiso matar a nadie”.
Aquella noche, Orihuela había tomado la decisión de escaparse cuando era escoltado hasta la seccional 12da, por infracciones viales. Y en el camino -según testigos- circuló a elevada velocidad, en zig zag, hasta que el oficial Rodríguez comenzó a disparar y usó tres armas, incluidas la suya y la del chofer del patrullero (en el asiento trasero iba otra uniformada). Esa noche efectuó al menos 20 disparos; 6 de esas balas se colaron en el cuerpo de Orihuela y fue su fin.
Para Fiscalía, está probado que el policía cometió un homicidio agravado (castigado con perpetua), porque de las pruebas recabadas hasta ahora se desprende que Rodríguez no sólo disparó desde el costado del camión, sino también de frente hacia la cabina.
Para Fiscalía, la investigación está casi concluida y en los próximos días pedirá la audiencia para elevar la causa a juicio. Zuleta anticipó que solicitará la producción de otras pruebas antes de pasar a juicio. “No todo es como dice Fiscalía, hay elementos de convicción que contradicen su teoría del caso”, concluyó el defensor.