El Rally Dakar 2025, que se llevará a cabo del 3 al 17 de enero será la edición número 47 de la carrera más dura del mundo y la sexta consecutiva en Arabia Saudita, donde está todo listo para llevar a cabo una competencia que promete ser revolucionaria y la más extrema de todas las disputadas en Oriente Medio. Como ocurre desde 2022, el evento será la primera fecha del Campeonato Mundial de Rally, conocido como W2RC. El director del evento, David Castera, reveló en Infobae los detalles y explicó que los pilotos se enfrentarán a un prólogo y 12 etapas, entre ellas el desafío denominado “48 Horas”, además de una etapa maratón (los competidores no tienen asistencia mecánica), seguida de una travesía por el Empty Quarter (cuarto vacío), que es el segundo desierto más grande del planeta detrás del Sahara.
En total, los competidores que tomen la salida en Bisha se enfrentarán a una distancia de unos 7.700 kilómetros, 5.100 de ellos cronometrados, es decir, de carrera pura. Por primera vez y en la búsqueda de mejorar la seguridad, cinco etapas han sido trazadas en recorridos separados para los vehículos de la Federación Internacional de Motociclismo (FIM) y la Federación Internacional del Automóvil (FIA).
En 2024, los pilotos descubrieron el formato de la crono de “48 Horas”, una etapa XXL que se extiende durante dos jornadas con la obligación de apagar los motores con la puesta del sol y que reparte a los pilotos en zonas de descanso minimalistas perdidas (o casi) en mitad del desierto saudita.
En la edición de 2025, este desafío mayúsculo vuelve a figurar en el menú del evento en un formato cocinado a fuego lento que promete dejar huella: una ración de kilometraje más generosa (FIM, 958 km / FIA, 971 km), con terrenos más variados durante los dos días y, sobre todo, un exigente timming a partir del tercer día de carrera.
Las dificultades se encadenarán después sin apenas tregua para los corredores, que deberán hacer gala de rendimiento y prudencia durante la etapa maratón previa a la jornada de descanso del 10 de enero en Ha’il, el corazón de la competencia saudita.
Ahora bien, nada estará decidido en el ecuador de la carrera, pues la segunda semana tiene reservado un menú cuanto menos frondoso para los pilotos. Precisamente en este segundo acto se concentran gran parte de las especiales trazadas en itinerarios diferentes para las categorías de motos y de coches, una separación que arroja beneficios múltiples para sus protagonistas. Al reducir las situaciones propensas a los adelantamientos, se maximiza la seguridad y, en términos deportivos, los trazados paralelos obligan a los copilotos a velar por la navegación sin la “ayuda” de las huellas de las motos, lo que permite al mismo tiempo que los coches salgan al recorrido diario con los primeros rayos del sol. Se aleja, pues, la perspectiva de girar de noche en las dunas.
La última etapa, con una salida clásica en línea, promete ser un bonito y fulgurante desfile nuevamente hacia Shubaytah, rumbo a una meta final que se disputará por primera vez en pleno corazón del vivac.
Además, volverá a estar la divisional llamada “Dakar Future”, con vehículos propulsados con energías alternativas.
> Los argentinos
Entre las Motos RallyGP, la clase mayor, estarán los hermanos Kevin y Luciano Benavides.Además estará el neuquino Juan Santiago Rostan. En la categoría más potente de Autos hay un solo argentino anotado. Se trata de Juan Cruz Yacopini, nuevamente con Toyota Hilux. La presencia de argentinos será singular en Challenger: Nicolás Cavigliasso junto a su esposa Valentina Pertegarini, por el otro David Zille con Sebastián Cesana. La divisional Side by Side será la de mayores incorporaciones: Fernando Álvarez Castellano. El dúo de Jorge Pérez Companc y Cristóbal Pérez Companc cierran la lista preliminar, siendo parte de los anotados en la experiencia Dakar Classic para coches históricos y recorrido personalizado, de especial interés en la prueba.
> Un clásico
Al margen de la carrera principal, el Dakar Classic tendrá a 76 coches y 19 camiones históricos que se enfrentarán a un reto de regularidad. Este año se permitirá la presencia de vehículos originales o réplicas que participaron hasta 2005 en una vieja postal.