En medio del fuerte conflicto que se armó en el Poder Judicial a partir de una serie de acciones de la Corte de Justicia, su presidente rompió el silencio. Antes de participar del Tedeum, Marcelo Lima tomó contacto con este diario y aclaró cuáles son los términos del mecanismo de reemplazo de jueces que desata polémica y anunció que se reunirán con el fiscal General y los abogados que tienen dudas acerca del tema. Se refirió también al aumento que le dieron a un grupo de trabajadores y que crispa al resto y, tras una lluvia de críticas, informó que bajaron la millonaria licitación para alquilar máquinas de café.

-Sacaron un nuevo Acuerdo que se refiere a la polémica por la designación de jueces en las causas penales, ¿es a modo de respuesta a los que critican a la Corte de Justicia?

-No, lo hicimos con el espíritu de aclarar las dudas que puedan existir. El jueves nos reunimos y resolvimos establece una aclaración del Acuerdo N° 5 que salió hace un tiempo y que ha generado, tal vez, alguna confusión.

-El fiscal General, el Foro de Abogados y la Asociación de Abogados Penalistas sostienen que con ese acuerdo permite digitar qué juez interviene en tal o cual causa judicial.

-No es así. Este nuevo Acuerdo aclara y establece cómo es el sistema. Con este sistema, es imposible que se digite qué juez va a intervenir en una causa. Se sortean los turnos entre los 19 magistrados del Colegio de Jueces, son turnos semanales, con lo que se respeta perfectamente el principio del juez natural.

-Pero ellos cuestionan el mecanismo de reemplazo del juez natural… 

-Los turnos sorteados anualmente se ingresan a un sistema informático donde se sabe cuáles son los periodos de turno de cada juez. Al que se le asignó una causa por estar de turno puede estar dictando un fallo, tomando una audiencia, etc. El juez puede estar imposibilitado para realizar una tarea en la nueva causa que le tocó, entonces el nuevo Acuerdo especifica cómo se hace y quién lo debe reemplazar o subrogar. Aclara que debe ser el juez del siguiente turno, eso está perfectamente establecido y es legal. Si el que continúa tiene una problemática, pasa al siguiente. Y hay que observar algo: el reemplazo es transitorio, no es que al juez subrogante se le da la causa en forma permanente. Luego de que el juez subrogante toma la audiencia, la causa vuelve al juez previniente y sigue desempeñando su tarea en esa causa.

-Los críticos marcan que la Oficia Judicial no debería estar facultada para reemplazar a un juez por el cúmulo de trabajo. 

-Lo que puede suceder es que un juez esté en una audiencia, que esté juzgando, y en esos casos no se puede sacarlo de su trabajo y llevarlo a que tome una audiencia por una causa nueva.

-¿La nueva audiencia no debería fijarse cuando el juez previniente no esté con otra tarea y pueda asistir?

-¿Qué se hace cuando hay 30 audiencias por día en 9 salas? No se puede postergar la celeridad que exige el sistema. Uno de los principios que establece el sistema acusatorio es que el proceso debe culminarse en tiempo razonable y hay penas para los que no lo hagan así.

-¿Hay marcha atrás o una corrección a partir del revuelo que se armó? 

-De ninguna manera, es una aclaración de los que ya habíamos resuelto en el Acuerdo anterior para evitar confusiones.

-Cuando se desató la polémica por esto del reemplazo de jueces, Eduardo Quattropani (fiscal General) dijo que todo se debía al mal asesoramiento o influencia del secretario administrativo. ¿Hubo algo de eso? 

-No. Surge de un extenso y profundo análisis que hemos hecho los ministros de la Corte, surge de legislación comparada, se estudió la legislación que existe en Río Negro, Chubut, Tucumán, Santa Fe y Chile.

-¿Han hablado con el fiscal General?

-Siempre tenemos diálogo con el fiscal General y lo venimos charlando. El lunes nos vamos a reunir los miembros de la Corte, para acordar un día para volver a reunirnos con él, con el Foro de Abogados y con los abogados penalistas.

-Hubo un pedido escrito y público que hicieron el Consejo de Fiscales, el Foro de Abogados y la Unión Judicial de apertura del diálogo.

-Estamos abiertos al diálogo. Lo que ha pasado en esta oportunidad es que se han dado circunstancias muy especiales. Dos de los ministros de la Corte estaban en el Chaco, en una asamblea, yo tuve un problema de salud, Victoria estaba con el Consejo de la Magistratura, entonces no podíamos generar una reunión.

-¿Cuál es el argumento del aumento que le dieron solamente a un grupo de empleados y no a todos?

-Hay una evaluación que tiene que ver no solamente con el trabajo, sino con la disponibilidad. Lo que se ha otorgado es un mal llamado plus, que es un emolumento transitorio para los administrativos de las Ofijus, los coordinadores fiscales, los informáticos, los oficiales notificadores y los que trabajan en la morgue. No es un grupo tan reducido. Esto tiene que ver con el trabajo y que están disponibles para ser convocados las 24 horas, a diferencia de los demás trabajadores salvo casos muy excepcionales.

Hay razones presupuestarias que nos impiden darles un adicional a todos los empleados del Poder Judicial”

-¿Lo podrían extender a todos los trabajadores como lo pide la Unión Judicial?

-Nos encantaría, pero es imposible por un tema de recursos.

-¿Creen que fue el momento adecuado de hacerlo, cuando hay una crisis generalizada?

-Este reclamo, como el reclamo para los notificadores o los coordinadores fiscales, lo vienen haciendo hace mucho tiempo. Nos parecía que debíamos darle respuesta a la entrega y el trabajo tan personalizado que están llevando adelante.

-¿Ninguno pasa a ganar más que un juez?

-Para nada. Hay empleados que tienen una antigüedad superlativa, pero de ninguna manera ganan más que un juez.

-Siguiendo con las polémicas, ¿por qué llamar ahora a una licitación millonaria para alquilar máquinas de café?

-No es que hayamos decidido ahora empezar a tomar café. Las máquinas ya estaban hace mucho tiempo en la Corte y el Ministerio Público. Esa licitación culminó y al terminar, se disparó el procedimiento para llamar nuevamente a licitación para que continúen. Habida cuenta de los montos de la máquina, el café, el mantenimiento, hemos advertido que es un número superlativo y no nos parece correcto.

-¿Entonces?

-Entonces, se ha dado de baja la licitación.

-¿Fue una desinteligencia política, más en la coyuntura económica?

-No, esto se disparó automáticamente. El aparato administrativo cuando vio que venció el periodo de la licitación anterior, llamó a la licitación. Fue falta de información.

-Supongo que el aparato administrativo necesita de la aprobación de la máxima autoridad…

-En algunos casos, cuando no hay insumos necesarios, como en este caso, se dispara la licitación.

-¿Entonces es el aparato administrativo el que decide?

-No, estamos hablando de insumos, hablando de cuestiones mínimas. Es como cuando falta papel. Apenas vimos el monto involucrado, decidimos dejarla sin efecto.

-¿Van a recibir al gremio de la Unión Judicial?

-Por supuesto. Vamos a recibir a todos aquellos que han solicitado audiencia. En el caso del gremio, vamos a esperar que cesen las medidas de fuerza porque si están, no hay lugar para el diálogo.

-El secretario General dice que los empleados están molestos y enojados, ¿perciben ese enojo? 

-Estoy enojado, porque el secretario General me mandó un whatsapp diciendo que necesitaba hablar conmigo. Le contesté que estaba en Buenos Aires participando de un acto, que cuando llegaba nos reuníamos. Cuando llegué me encontré con que el conflicto ya estaba estallado, sin haber tenido el diálogo que él proponía.