Tras asumir a principios de año la conducción del Museo de la Casa Rosada, dependiente de la Secretaría General de la Nación, Virginia González se encuentra en la provincia desde el lunes pasado en el marco del lanzamiento del proyecto Colecciones Sarmientinas, junto al Ministerio de Turismo, Cultura y Deporte del Gobierno de San Juan. Exdirectora del Museo Histórico Sarmiento, la Licenciada en museología y Magíster en Historia del Arte dialogó con DIARIO DE CUYO y profundizó acerca del desarrollo de esta colección, que comenzará siendo virtual, “destinada a investigadores y estudiosos de la figura de Domingo Faustino Sarmiento y su relación con las artes, la política y la sociedad del siglo XIX’, explicó la funcionaria que ofreció charlas y un taller práctico, en el marco de una agenda que concluirá hoy.

La propuesta “vinculará instituciones de Buenos, San Juan y de todo el país, en principio, para extenderse después a Chile, Uruguay, Brasil, Paraguay y también en Estados Unidos donde Sarmiento fue Ministro Plenipotenciario’, añadió.

– ¿La finalidad de este trabajo es reivindicar la figura de Sarmiento?
– Exacto. Yo empecé este proyecto siendo directora del Museo Histórico Sarmiento en Buenos Aires en 2022, pero en esa gestión no me dejaron avanzar. Fue este año que se reactivó en el Museo Casa Rosada. Primero tuve la autorización de la Subsecretaría de Planificación de la Secretaría General de la Presidencia y luego presenté el proyecto a Eduardo Licciardi, director de la Casa de San Juan en Buenos Aires, quien me abrió las puertas a esta provincia.

– ¿Cómo es la estructura de estas Colecciones…?
– La idea es terminar con la información fragmentada, queremos hacer un repositorio digital para que un investigador pueda detectar lo que busca mucho más rápido. El primer paso es alojar todos los museos y las instituciones que tienen patrimonio sarmientino en una web. Por año se publican aproximadamente 7 libros de Sarmiento y la idea es facilitar la tarea a los autores.

– ¿Será una pagina en permanente actualización?
– Muy activa porque la finalidad también será visibilizar nuestras instituciones. Por supuesto, el primer paso es en San Juan, porque acá tenemos a la Casa Natal, el Museo Gnecco, el Museo Franklin Rawson, la Biblioteca Franklin, todas instituciones muy fuertes vinculadas a la figura de Sarmiento, al igual que la Escuela Normal Sarmiento y el Colegio Santa Rosa. Sin embargo, es el Museo Histórico Sarmiento el que tiene el mayor aservo epistolar porque Sarmiento estuvo mucho tiempo en Buenos Aires.

– ¿Se trata sólo de documentos escritos?
– De todo, porque por ejemplo la Escuela Catedral del Norte tiene hasta un brazalete de la epidemia de fiebre amarilla que repartió Sarmiento para la Comisión de Sanidad en aquel tiempo; algo de todo lo que hay entre documentación, objetos, libros que él donó a las bibliotecas… Cuánto más crezca el proyecto y más difusión tenga, más instituciones vendrán a nosotros con su patrimonio. Es como una rueda.

“Sarmiento fue una persona fuera de serie, porque muchos presidentes han trabajado en el desarrollo del territorio, pero él fue visionario’.

– ¿Cuáles son los próximos pasos?
– Luego de las capacitaciones, empezará el trabajo dentro de las instituciones que tendrán que subir la información de su colección a la página, por ejemplo, el Museo Gnecco tiene un montón de colecciones, el Museo Histórico Sarmiento también, el Franklin Rawson tiene las colecciones de su hermana Procesa, entonces se va a ir poco. Y en Buenos Aires, el Museo Histórico Sarmiento, el Museo Casa Rosada, el Archivo General de la Nación, la Biblioteca del Maestro y otras instituciones, también lo harán. Lo importante es que ya está en marcha, al igual que la página que es museocasarrosada.org.ar/colecciones argentinas. Ahí, tenemos información del proyecto, pero no hay nada cargado aún.

– ¿Y luego?
– Yo estaba como directora del Museo Histórico Sarmiento cuando empezó todo y recibíamos investigadores que necesitaban cosas que no estaban ahí, pero sí estaban en otro lugar. Entonces dijimos ‘Qué bueno sería que todo esté en un mismo catálogo’. Por eso a futuro queremos hacer un catálogo físico, una exposición virtual y recorridos visuales de estas colecciones, una exhibición y conferencias online.

– ¿Por qué cree que se lo ignoró e incluso denostó en los últimos años, sobre todo desde la mirada oficial?
– Es una figura que tiene sus altibajos dependiendo de la política que esté de turno. A Sarmiento no se supo valorar, más allá de que fue un hombre que hizo mucho por la educación, la tecnología, la industria, la innovación, la producción… Sarmiento fue una persona fuera de serie, porque muchos presidentes han trabajado en el desarrollo del territorio, pero él fue visionario.

– ¿No se lo entendió, quizás?
– Sarmiento fue un incomprendido en su tiempo y creo que lo es todavía.

– Un ejemplo que lo desacredita es la frase de “No ahorrar sangre de gaucho’…
– Se ha tomado mucho esa frase que escribió en 1861 a Mitre. Aquí le está hablando a un amigo de una situación de insurrección que hay que controlar, pero también habla de Urquiza y de eso no se habla. Ahí mismo también dice sobre Rosas o se exilia o lo matamos. La violencia era la manera en que se resolvían los conflictos en esa época, también para todos sus contemporáneos. Él tuvo la desgracia de escribir lo que pensaba.