El sector olivícola está cerrando la cosecha de las últimas variedades y, tal como esperaban, el volumen en kilos fue menor al año pasado. Temporales en meses claves afectaron la productividad de las 15.000 hectáreas que hay en la provincia. Antes de que esto ocurriera esperaban tener mejor rendimiento que en 2023, pero finamente fue un 31% más bajo que la cosecha pasada. Sin embargo, estos números se vieron compensados por las ganancias por exportación, ya que la mejora en el precio internacional hizo que en el primer semestre, las ventas fueran un 12,3% mayores en la comparación interanual.
En un informe de la Cámara Olivícola de San Juan se detalló que hasta la tercera semana de julio, la cosecha fue de 81.955.250 kilos de aceitunas de todas las variedades. Esto significó un a baja del 36% con respecto a los 126.085.000 kilos que habían estimado para este año. Además, fue un 31% menor que lo que lograron obtener los productores en 2023, cuando superaron los 120.000.000 de kilos.
Esta baja ya la esperaban, a pesar de las primeras estimaciones más positivas. Es que durante 2023 hubo dos fenómenos climáticos que terminaron reduciendo la producción tanto en San Juan como en otras provincias. El primer problema se produjo en septiembre del año pasado, cuando un viento Zonda afectó los árboles en plena época de floración. En noviembre cayó una helada que no esperaban y también causó daños, frenando el crecimiento de las frutas. Por eso, antes de iniciar la cosecha, ya esperaban que hubiera una merma en la productividad, que calculaban que iba a estar en el 30% que finalmente se confirmó.
Si bien estos valores son un golpe para el sector olivícola, los empresarios exportadores pudieron compensar parte de la caída gracias a la mejora de los precios internacionales. Si bien el grueso de las ventas de esta cosecha se reflejarán en los próximos meses, durante el primer semestre el sector pudo aprovechar la tendencia en alza del precio de la tonelada. En mayo pasado, los valores internacionales superaban los 8.000 dólares, debido a la caída de la producción que sufrió Europa y el alza en la demanda.
Esta revalorización del aceite de oliva a nivel internacional empezó en 2023 y podría revertirse de tener una mejor cosecha en los próximos meses en países como España e Italia. Aun así, durante el primer semestre, le permitió a San Juan tener un 12,2% más de ganancias en exportaciones con respecto a 2023. Este dato, que publicó en un informe la Cámara de Comercio local, ya deja ver la merma en la productividad de los olivos locales. Este aumento fue en las ganancias, ya que se generaron 13.828.164 dólares, en comparación con los 12.324.000 dólares del año anterior. En peso, en cambio, se exportaron un 14,85% menos de kilos de aceite.
Para San Juan, la mejora en el precio del aceite tiene un gran impacto, ya que el 70% de su producción de aceitunas tiene esta finalidad, con más de 10.000 hectáreas. El 10% de las hectáreas son variedades para conserva, lo que diferencia a la provincia de La Rioja, por ejemplo, donde la mayoría se destina a este fin. El restante 20% son variedades mixtas, que se pueden usar para los dos fines, aunque desde hace años se destinan en su mayoría a aceite, por la diferencia en el rendimiento.
Durante la temporada se profundizó también el crecimiento de las zonas como Cañada Honda y El Acequión, donde hoy se concentran la mayoría de las hectáreas productivas. Existe un porcentaje de zonas que quedaron abandonadas, sobre todo en el Este y Norte (ver infografía). A su vez, el sector ocupó para las tareas de cosecha a 6.676 personas. De estas, detallaron, 755 son trabajadores permanentes del sector y el resto corresponde a personal temporario. En este último grupo, diferenciaron que 3.876 trabajaron en fincas de variedades aceiteras y 2.045 en aceitunas de conserva.