En el marco de una tendencia decreciente de la inflación que se condecía con la reducción del incremento del precio de los alimentos, los primeros estudios privados relevaron un aumento del 3,8% en la canasta de productos básicos de este rubro durante el mes de junio.
La consultora LCG expresó que una suba del 0,6% en la última semana del mes justificaron la cifra, lo que representó una desaceleración de 0,3% con respecto a los siete días previos. El 3,8% en alimentos se encuentra por encima de los 2,3% en promedio que tuvieron abril y mayo.
En el detalle de los alimentos, la última semana de junio atravesó caída en los precios de las bebidas, el azúcar, las frutas y las verduras, siendo este último rubro el de mayor retroceso: 2,9% en los siete días finales de mes. En contraposición, lácteos y carnes tuvieron pronunciados incrementos.
Se espera que el INDEC publique los datos oficiales el miércoles 12 de julio, que oscilarían en el rango del 5%, superior al 4,2% de mayo.
Según la consultora LCG, la variación de precios de junio en el rubo de alimentos fue:
Lácteos y huevos: 7,5%;
Aceites: 5,7%;
Carnes: 5,4%;
Azúcar: 3,8%;
Verduras: 2,3%;
Pan, cereales y pastas: 2,1%;
Bebidas e infusiones: 2%;
Condimentos y otros productos alimenticios: 1,9%;
Comidas listas para llevar: 1,8%;
Frutas: -2%.
Inflación en junio: qué números esperan las consultoras
En diálogo con Ámbito, Claudio Caprarulo, director en Analytica, vaticinó: “Por ahora mantenemos una proyección cercana al 5% para este mes y en la tercera semana de junio nos dio por debajo de 0,1% la inflación en alimentos y bebidas, la categoría más importante del INDEC”.
Por su parte, Camilio Tiscornia de C&T Asociados, también en charla con este medio dijo que “el dato del mes puede estar un poco abajo de 5%”. Por su parte desde pxq, se estima que la inflación de junio rondará entre 4,5% y 5%. “Desde finales del mes anterior hasta la semana actual, los bienes que conforman la categoría de la inflación núcleo registran un crecimiento muy moderado y con baja volatilidad”, ampliaron.
Si la medición de junio finalmente llega a ese nivel, será el primer mes de todo el semestre en el que se producirá una aceleración de la inflación. Cabe resaltar que en diciembre, el IPC saltó al 25,5%, en enero se moderó al 20,6%, en febrero continuó con el camino de la desaceleración y marcó un 13,2%, posteriormente en marzo se ubicó en el 11%, en abril fue del 8,8%, y en mayo llegó a 4,2%.
En cuanto a las proyecciones de inflación de los analistas de la City(de acuerdo con el último Relevamiento de Expectativas del Mercado (REM) que publicó a principios de mes el Banco Central), se vislumbra un escenario desafiante. A partir de junio, la desaceleración mensual se frenará y prevén que se estancará arriba del 5% en los próximos cuatro meses.