Los empresarios sanjuaninos se preparan para los posibles cortes de energía que puede haber en el verano. Tras las declaraciones del Jefe de Gabinete de la Nación, Guillermo Francos, creció el alerta para los meses más calurosos. En un principio, explicaron desde el gobierno local, los afectados serían los grandes usuarios, que tienen contrato directo con Cammesa. Pero ante la posibilidad de que se extienda a los usuarios comunes, desde la Federación Económica pidieron priorizar los horarios comerciales y de producción, frente a los de mayor uso residencial. Desde la Unión Industria, quieren dialogan a nivel nacional para disminuir el impacto en el sector.

El escenario futuro de cara al verano no es optimista. El país se enfrenta a una baja en la oferta de energía eléctrica y un aumento de la demanda, ya que se esperan temperaturas muy altas. Por eso el gobierno nacional armó un esquema de cortes programados. Desde la gestión local, el Director de Recursos Energéticos, José María Ginestar, dijo que “en un principio estos cortes serían a industrias electrointensivas, ya que lo que buscan es evitar una sobrecarga del sistema”. Esto último podría causar fallas graves, incluso la más problemática: un black out (ver Sistema al límite…). Los cortes programados los definiría Cammesa, a cargo del sistema nacional y no deberían impactar en los usuarios que dependen de Naturgy o Decsa.

En principio, entonces, los sectores más afectados serían los usuarios de grandes potencias, como algunas industrias. Por eso representantes del sector ya están en diálogo con las autoridades nacionales. Hugo Goransky, que es integrante de la comisión de la Unión Industrial Argentina y también de la UISJ, dijo que están analizando alternativas. “Estamos en contacto para hacer algo acordado, porque entendemos que puede haber problemas, pero esperamos que se hagan las cosas ordenadas para que las empresas se preparen”, explicó el sanjuanino, que tiene llegada nacional.

Algunas de las opciones que presentarán es que se respecte a las industrias que son de proceso continuo, esto quiere decir que trabajan las 24 horas los 365 días del año. También pedirían que se acuerde en caso de que alguna tenga que hacer tareas de mantenimiento, para programar en la época de mayor demanda, o acordar horarios distintos.

Quien también habló sobre la problemática fue el presidente de la Federación Económica, Dino Minozi, quien aseguró que hablaron con los socios y van a pedir que “se priorice al sector productivo”. Si bien dentro de la institución son la mayoría pequeños consumos, temen que los cortes puedan extenderse a este sector. Frente a esto, dijo que “vamos a pedir que no sea en los horarios pico de los comercios, productores agrícolas e industrias”. Dijo que si los cortes son “cuando hay mayor consumo residencial es molesto, pero no hay daños productivos”.

En cuanto a la posibilidad de que la provincia quede aislada frente a estos problemas, algo que analizaron los empresarios, Ginestar de Recursos Energéticos dijo que no es posible. El funcionario explicó que hoy San Juan tiene capacidad instalada entre diques y paneles solares cercana a su demanda, pero que estas energías no pueden reemplazar las tradicionales. Esto se debe a que ambas dependen de condiciones que no son estables, como los horarios de sol y la cantidad de agua embalsada. Por eso, la provincia depende del sistema interconectado nacional, que es el que está en riesgo.

> Sistema al límite y miedo a un black out

Los anuncios de un plan de cortes programados llegan luego de que confirmaron que una de las centrales nucleares saldrá de funcionamiento. Se trata de Atucha II, que tenía un mantenimiento programado que podría demorar hasta dos años. Con la perspectiva de que vuelva a haber sequía en el Río Paraná y baje la producción de hidroeléctricas, está prevista menos oferta de energía. A eso se suma previsiones de un verano muy caluroso y más demanda. Si estos dos factores se combinan sin control, puede fallar todo el sistema hasta llegar a un black out, esto es, una falla masiva. Estos son eventos muy raros, pero en 2019 el país sufrió uno, que se ubicó entre los más graves del mundo ya que se desconectó todo el país y afectó hasta Paraguay y Brasil.