La votación ajustada en el Senado de la Nación que aprobó el RIGI (Régimen de Incentivo a las Grandes Inversiones) significó un alivio para el sector minero de San Juan, en especial los proveedores. Integrantes del sector habían planteado algunas preocupaciones sobre el artículo, ya que temían quedar en una situación desfavorable. Finalmente, en la Cámara Alta hubo modificaciones y entre estas sumaron un mínimo del 20% de inversiones para empresas locales. Además de esto, creen que habrá un mayor impulso de los proyectos metalíferos de la provincia, lo que solucionaría el techo que se viene dando, debido a la falta de nuevas minas productivas. En simultáneo, industriales presentaron una propuesta en el Congreso para que haya más beneficios a las pymes.

Uno de los empresarios que había expresado algunas dudas fue Fernando Godoy, presidente de Caprimsa. Cuando la segunda versión de la ley empezó a debatirse en Diputados, el referente de una de las cámaras de proveedores aseguró que tenía “sentimientos encontrados”. Esto era porque les preocupaba que las pymes estuvieran en una situación de desventaja ante la posibilidad de importar bienes y servicios. Pero la última versión de la ley incorporó la base de contrataciones de empresas locales y esto, dijo Godoy, mejoró la situación. “Estamos con más certidumbre en comparación con el proyecto anterior, porque antes no se definía bien y ahora dejaron asentado ese 20%”, dijo.

Juan Pablo Delgado, de la Casemi, fue uno de los primeros en defender el RIGI, incluso antes de los cambios, pero celebró que se incorporara este artículo. “Nosotros veníamos diciendo que las inversiones necesitaban estas condiciones y nosotros necesitamos a las inversiones, por lo que la aprobación es algo positivo”, dijo. Agregó que los cambios también resultaron una buena noticia para el sector: “Nosotros celebramos la idea, porque además también delimitó el marco en el cual se tiene que trabajar el proyecto y estamos muy conformes”, explicó.

Sobre las expectativas de ahora en más, los dos referentes de proveedores mineros dijeron que este es un primer paso, aunque muy esperado. Delgado aclaró que todavía restan algunos pasos, incluida la vuelta por Diputados donde tienen que aprobar nuevamente las modificaciones. Pero también dijo que es necesario “controlar las expectativas, porque todavía está sujeto a los tiempos mineros”. Es que la aprobación del RIGI es lo que querían las empresas mineras para poder salir a convencer inversores, pero primero deberán completar estos pasos. Godoy agregó que esto vuelve a poner a Argentina como un destino de inversiones, algo que venía hace tiempo frenado, lo que causó que en la actualidad haya pasado más de una década desde que abriera un proyecto minero.

Otro sector que seguía de cerca el debate en el Senado eran los empresarios industriales. Ricardo Palacio, presidente de la Unión Industrial San Juan, aseguró que la noticia cayó bien entre los socios, porque creen que dinamizará la economía de la provincia. Uno de los puntos nuevos que favorece al sector manufacturero es que en la nueva versión se limitaron cuáles son los rubros que pueden usar el RIGI. El empresario dijo que esta aprobación significa un primer paso, ya que irán en busca de una ley que implique un incentivo para las pymes. En la actualidad hay un proyecto nacional, que incluye baja impositiva, entre otras medidas, que desde San Juan apoyan.

> Todos los cambios en el Senado

Una vez que ingresó al Senado, el proyecto de la Ley Bases sufrió cambios propuestos por los legisladores. El RIGI tuvo cinco principales. El primero fue la reducción de actividades, ya que sólo aplicará a forestoindustria, turismo, infraestructura, minería, tecnología, siderurgia, energía, petróleo y gas. Agregaron el plan de desarrollo de proveedores, con un piso de 20% de contratación local. Modificaron los plazos de cobros en el mercado de cambios y la bonificación iniciará a partir de los 3 años. Aceptaron la venta de acciones y participaciones de las empresas incluidas. Cambiaron el procedimiento de aprobación para evitar que se queden afuera empresas por motivos formales.