Las concesionarias de autos vivieron ayer un día complicado. El cierre anticipado del mes por el comienzo del fin de semana extra largo hizo que la jornada de trabajo se extendiera más de la cuenta. Todo para alcanzar el volumen de patentamientos comprometido que les permita cobrar los incentivos comerciales. No fue fácil. Muchas no llegaron a hacerlo. Es que marzo fue un mes más duro a lo acostumbrado en los últimos tiempos pero, los anuncios de aumentos de precios en abril, como adelantó Ámbito Financiero, llevaron a que muchos clientes decidieran cerrar la compra este mes para evitar pagar más caro la semana próxima.
Pese a la dureza del mercado, las noticias son buenas. Las estimaciones que realizan en el sector señalan que el mes cerrará entre 80.000 y 84.000 unidades. Con un día todavía por computar, ayer había 75.600 vehículos registrados, pero a último momento el volumen de 0 km que se patentan es fuerte. Por eso la cifra estimada es posible. Si se superan los 82.000 autos que se alcanzaron en el tercer mes de 2012, este mes se convertirá en el mejor marzo de la historia y sería el tercer mes seguido que logra ese récord, después de enero y febrero. El dato es importante ya que los feriados de hoy y de mañana le quitaron días hábiles al mes ya que el año pasado Semana Santa cayó en abril. De todas maneras, el mes que está cerrando superará a marzo de 2017 cuando se patentaron 78.000 unidades. Pero, aunque esa marca no se alcance, lo que es seguro que el de 2018 ya es el mejor primer trimestre de la historia para el sector en materia de ventas. En el acumulado del año ya se patentaron más de 270.000 vehículos. El registro anterior más alto era también en 2012 con 253.244 unidades. La cifra oficial de marzo se dará a conocer el martes próximo.
Abril es todavía una incógnita. Habrá que esperar cómo impactan los aumentos de precios en la demanda. Marcas como General Motors aumentarán los precios entre el 4% y más del 6%. Las otras marcas todavía no comunicaron sus nuevos precios. Este mayor aumento se debe a la suba del dólar de comienzo de año y la necesidad de las automotrices de recuperar rentabilidad, con la mejora de Brasil ya no habrá tantas bonificaciones debido a que los mayores descuentos se aplicaban a vehículos que llegan de ese país.