Ayer se realizó el Primer encuentro nacional de Centros de Desarrollo Vitícola, que reunió a 180 viñateros provenientes de Mendoza, La Rioja, Catamarca, Salta y Patagonia además de San Juan, en un proyecto conjunto entre INTA y Coviar vigente hace 12 años. La jornada comenzó con un taller de producción primaria para evaluar el presente con la mirada puesta en el futuro: debatieron sobre los procesos que van a implicar cambios en la competitividad, en la organización del trabajo y en los mercados en los próximos años. Además del taller compartieron su visión en un panel Renzo Carosio, Silvana Putelli, Julieta Mestre, Sebastian Rodríguez, Nicolas Yanzón y Matías manzanares, marcando el pensamiento joven sobre la actualidad y futuro de la uva de mesa, el turismo, la pasa de uva y la institucionalidad de la cadena. Hacia el 2030 se planteó la definición de una política estratégica vitivinícola, de alta densidad del trabajo, un fuerte integración de la evidencia existente producida en lo foros de Coviar, el expertise de referentes calificados y la interacción de los principales actores de la cadena. Los centros vitícolas que funcionan en el país son la piedra angular del Plan estratégico Vitivinícola, consolidándose como el espacio de transferencia a los productores y la difusión de programas en apoyo a la cadena. Ofrecen asistencia técnica a 9.820 productores de uva de Argentina.