Los bonos soberanos argentinos registraron subas al cierre de operaciones del día, luego de que el ministro de Economía, Martín Guzmán, revelara finalmente los lineamientos generales de su propuesta a los acreedores para la reestructuración de la deuda en moneda extranjera.
A las 17, hora de cierre de las operaciones bursátiles en Buenos Aires y Nueva York, el riesgo país de JP Morgan retrocedía 500 unidades, un 12,5%, para llegar a los 3.487 puntos de la mano de las mejoras en los precios de los títulos. Según operadores, se trató de una primera reacción positiva a la espera de más detalles sobre la oferta y sus chances de ser aceptada por la cantidad necesaria de bonistas.
Los títulos globales de deuda argentina mostraron subas de 8% en promedio para las emisiones en dólares más representativas.
Las subas alcanzaron a todos los papeles, en todos los plazos. Se trata de avances sólidos, aunque pequeños comparados con los derrumbes que sufrieron las cotizaciones en los últimos meses y que llevaron a la prima de riesgo argentina a valores récord desde 2005.
“Se pueden observar subas sobre todo los bonos más cortos, en las primeras operaciones en Nueva York, aunque todavía faltan muchos detalles de la oferta como si capitalizaran o no cupones y bonos a emitir. La propuesta en sí no es buena pero es mejor de lo que el mercado priceaba, igualmente todavía faltan muchos detalles y la negociación será dura”, dijo Mariano Marcó del Pont de Silver Cloud Advisors.
La reacción está lejos de ser un festejo o una apuesta por un acuerdo, pero al menos supone una lectura positiva de la disponibilidad de mayor información.
Hasta ahora, los inversores se manejaron con trascendidos, ya que Guzmán no había dado lineamiento alguno de cuáles serían los recortes que buscaría para el valor presente de la deuda, y aunque falte mucho por procesar una vez que el Gobierno presente la estructura de los títulos que prepara para reemplazar a los vigentes, algo de esa incertidumbre se redujo luego de la presentación de ayer.
“Es el fin de la incertidumbre. Para bien o para mal, tenemos un dato ahora. La reacción del mercado creo que es levemente positiva, creo que es efecto de que decimos ‘bueno, ya está’, más que una evaluación respecto a si la propuesta es buena o es mala”, dijo Diego Falcone de Cohen.
Trazos gruesos
Los inversores hasta ahora sólo pueden analizar trazos muy generales del plan de Guzmán. La oferta anunciada ayer apunta a resolver la deuda bajo ley Nueva York, que se reduciría en apenas 5,4% el capital. La quita es prácticamente nula en ese punto.
En lo que sí habrá recorte es en el pago de los intereses, ya que el ahorro que se propone es de casi USD 38.000 millones. Los títulos a reestructurar son 21, de los cuales 17 fueron emitidos en los últimos 4 años en dólares, euros y francos.
"Vamos a cambiar la estructura de bonos de deuda por otra: período de gracia por tres años, hasta 2022. Empezaría a pagar en 2023 un cupón promedio de 0,5% y esas tasas crecerían hasta niveles sostenibles. El interés promedio de la propuesta es 2,33%. Hemos tratado de entender a los acreedores. La propuesta es más reducción de intereses que de capital. Reducción de USD 3.600 millones, quita de 5,4% del stock de deuda externa y reducción de interés de USD 37.900 millones, que es el 62%”, detalló Guzmán en su presentación.
La propuesta se conocerá en detalle en las próximas horas, cuando sea enviada a la Securities & Exchange Commission (SEC), el regulador del mercado de los Estados Unidos.
“Si bien el recorte en los intereses es amplio, favorece en parte a los acreedores porque el ahorro es muy inferior a lo que el FMI sugería (entre USD 55.000 millones y USD 85.000 millones). El período de gracia está en línea con lo esperado, mientras que la tasa de interés es muy baja. Aún no se conoce cómo se distribuirá y tampoco qué nuevos bonos se ofrecerán y la extensión de plazos”, resumió Research for Traders en un informe para sus clientes.