Según la página de la Confederación Argentina de la Mediana Empresa, este fin de semana largo fue nutrido en cantidad de turistas pero moderado en gasto. De los datos recabados, se desprende que hubo un millón de turistas por el país, casi lo mismo que el año pasado, y desembolsaron $2.782 millones.
Del mismo modo, ampliaron que la estadía media fue de 2,6 días y el gasto promedio diario por persona se ubicó en $1070, un 36,8 % superior al mismo feriado en el 2017.
La permanencia fue levemente más corta que el año pasado, y muchas familias eligieron destinos cercanos o donde tienen vínculos que pudieran alojarlos, para abaratar el viaje.
El relevamiento que se hizo en 40 ciudades turísticas determinó que las ventas de bienes y servicios asociadas al movimiento de este sector cayeron 5,1% frente al mismo fin de semana del año pasado.
Un factor adicional que incidió en el bajo consumo de estas mini vacaciones fue que algunas aerolíneas comenzaron a cobrar adicionales, incluso por la valija de mano, monto que aumenta a medida que sube el peso. Eso hizo que la gente que se trasladó en avión sea particularmente cuidadoso en la compra de regalos y recuerdos del viaje.
Balance anual
- En lo que va del año ya hubo ocho fines de semana largos (tres extra-largos), donde viajaron un total de 10.138.000 turistas que gastaron $28 mil millones.

