Frente al plan del Gobierno nacional de impulsar que las provincias modifiquen el sistema impositivo con el que hoy sostienen su recaudación, basado principalmente en el cobro de Ingresos Brutos, por un nuevo gravamen que se aplicaría sólo sobre los precios al consumidor o las ventas, en la administración sanjuanina rechazaron la idea y pidieron tiempo para analizar la propuesta.

La razón, según dijo el ministro de Hacienda, Roberto Gattoni, es que la Provincia ya aplica un régimen que se asemeja al que pretende la Nación. “Así como está planteado nos parece muy simplista y no estamos de acuerdo, pero primero hay que ver el proyecto en profundidad”, dijo el funcionario.

Lo que está en estudio en dos de la carteras de la gestión macrista, la de Hacienda, a cargo de Nicolás Dujovne, y de Interior, que está en manos de Rogelio Frigerio, es una reforma tributaria que prevén más profunda, que incluirá nuevos impuestos para sustituir otros considerados “distorsivos”, y que podrían aplicarse a partir de 2018.

El principal sería un impuesto a las ventas finales, que cobrarían las provincias a comercios, industrias o hasta productores primarios, sólo cuando vendieran sus productos a consumidores finales.

El gravamen es similar al que se aplica en otros países, sobre la última etapa de la cadena de distribución. Lo que se está analizando es una alícuota general para todos los rubros o diferenciarse por sector, aunque aún no están definidos los porcentajes. El nuevo sistema apunta a sustituir la cobranza de Ingresos Brutos, que hoy representan buena parte de la recaudación de las provincias.

Pero Gattoni dijo que acá no están convencidos de lo beneficios de la creación de una especie de nuevo IVA provincial porque manifestó que la modalidad de aplicación del impuesto a los Ingresos Brutos que rige en San Juan ya se asemeja a lo que quiere la Nación. En ese sentido explicó que “toda la actividad agrícola e industrial” está exenta, salvo las ventas a consumidor final.

En ese sentido dio como ejemplo que la venta de vino no está alcanzada por el tributo, aunque no ocurre lo mismo en Mendoza.
“Nuestro esquema de Ingresos Brutos es mucho más razonable que el de muchas jurisdicciones, pero sigue siendo importante y por eso queremos saber bien cómo es el proyecto nacional y cómo va a funcionar, porque puede terminar siendo una trampa”, sostuvo el ministro.

Frente a la idea, el jefe de las finanzas locales dijo que “creemos que todavía no hay elementos para ponerse a discutir”.
Lo que también ha trascendido es que el Gobierno nacional está impulsando un encuentro de los ministros de Hacienda de todo el país en Mendoza, antes de fin de mes, aunque todavía no hay fecha precisa, para avanzar en la discusión de la propuesta.

El temor es que sólo se vean beneficiadas aquellas provincias que tienen mayor consumo, como ocurre en la Provincia de Buenos Aires o en la misma Ciudad de Buenos, en detrimento de jurisdicciones más chicas, como San Juan.

En el caso local, según precisó el funcionario, Ingresos Brutos representa casi el 60% de los beneficios provinciales. Esto es porque para este año está presupuestada una recaudación de 3.600 millones de pesos y de ese monto Ingresos Brutos representa un total de 2.128 millones de pesos.

El tributo tiene una alícuota general del 3%, a lo que hay que agregarle el impuesto al Lote Hogar, con lo cual asciende al 3,6%. Y se aplica, por ejemplo, sobre la actividad comercial.

 

Hay en carpeta un fondo anticíclico

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Otro de los proyectos que tiene en carpeta el Gobierno nacional es la creación de un nuevo Fondo Anticíclico con la finalidad de mantener el equilibrio de las cuentas públicas. La idea es constituirlo a partir de un porcentaje de los excedentes tributarios que perciban las provincias sobre lo presupuestado para cada año. El fondo constituido pertenecería al conjunto de los distritos y se activaría para aquél que registrara tres meses seguidos de caída en su recaudación.

Sobre la iniciativa, el ministro Gattoni sostuvo que tampoco lo ven con buenos ojos porque lo que quiere el Gobierno local es que “los fondos vayan a las provincias y que sean éstas las que dispongan de esos recursos”.

Y recordó que en San Juan ya existe un fondo de estas características, que equivale a dos grillas salariales. Fue creado en el 2004 para atender los desfasajes financieros que se pudieran producir aunque, desde su constitución, no ha hecho falta echarle mano a ese dinero porque no han habido dificultades económicas en la provincia que lo demanden.