La recuperación económica internacional y los menores costos en dólares brindan las condiciones para aumentar las exportaciones vitivinícolas argentinas, aseguró el Instituto de Estudios sobre la Realidad Argentina y Latinoamericana (Ieral) de Fundación Mediterránea.
No obstante, el Ieral -en su Informe de Coyuntura Regional Cuyo "Panorama vitivinícola al primer semestre de 2021"-, advirtió que "el contexto de incertidumbre económico no las favorece" a las empresas del sector.
En la primera parte de 2021, precisó el trabajo, "aún con una mayor cosecha a nivel nacional (17%), los stocks vínicos son menores a las del año pasado, lo cual se traduce en una menor oferta de vinos argentinos", fenómeno que genera "menor cantidad vendida (-13%) y mayores precios, aumentando más que la inflación general (28% por encima)".
En el primer semestre del año, la exportación de vinos varietales fraccionados, principal negocio del sector (en facturación) aumentó 14% interanual en volumen, con mayores precios (6% en dólares) en la mayoría de los principales países clientes; en menor porcentaje en los clásicos (EE.UU., Canadá y disminuciones en Reino Unido), y con fuertes incrementos en emergentes (Brasil, México y China).
Por otra parte, se registró un menor consumo interno de vinos, pero sólo en los genéricos, tras la importante recuperación de 2020 (aunque con precios muy bajos); compensada parcialmente por una mayor preferencia por los vinos varietales, que registran un crecimiento en el consumo pero con precios rezagados con relación a la inflación.
En el caso de las exportaciones de vinos a granel (grandes volúmenes), se derrumbaron durante este año, tras las grandes ventas de 2020, cuando había altos stocks, precios bajos en dólares y dólar caro, y pobres cosechas de uva en otros países productores..
En tanto, en 2021 se redujo el porcentaje de uvas destinado a la elaboración de jugos de uva (mostos) y disminuyó la cantidad exportada; y, en materia de precios, hubo un cierto incremento en dólares, frenado por una mayor oferta del resto del mundo.
Entre los vinos varietales fraccionados, EE.UU. sigue siendo un gran comprador de los vinos argentinos (35% del total), pero amesetado; mientras que Brasil registra en 2021 un notorio incremento en la cantidad de vinos importadas.
Según destacó el Ieral, la Argentina registra actualmente menores costos argentinos en dólares: Los impuestos y los costos laborales siguen siendo altos, pero en dólares son menores a los de hace cuatro años atrás por las devaluaciones experimentadas desde mediados de 2018; además, tras la pandemia, hay una recuperación en la mayoría de los países compradores de vinos.
"Hay demanda, y los costos han disminuido, señal de que se puede aprovechar esta ventaja para exportar; aún así, nada es simple en nuestro país; la incertidumbre económica (inflación, riesgo devaluatorio, brecha cambiaria, riesgo país, amenazas de más impuestos, etc.) no constituyen un contexto ideal para grandes inversiones, las cuales son muy necesarias para el negocio vitivinícola", concluyó el trabajo.