Por efecto de la crisis, que también golpea al campo, y después de 8 años de crecimiento de la superficie cultivada en San Juan con tomate para industria, contando desde el 2010 a esta parte, para la próxima temporada en el sector se calcula que sólo se van a sembrar 2.000 hectáreas, la misma cantidad que en el período pasado. Entre los principales factores que motivan esta situación se encuentran la falta de financiamiento para el desarrollo del negocio, agravada por la corrida cambiaria que provocó la suba del dólar y el crecimiento de las tasas de interés que les imposibilitan a las fábricas y a los productores el acceso al crédito.
Hasta la temporada pasada la actividad venía con una fuerte expansión en la provincia porque en 8 años se duplicaron las hectáreas cultivadas, pasando de 1.000 en el 2010 a 2.000 en el período pasado (ver infografía). Y con una fuerte mejora en los rendimientos, que crecieron alrededor de un 150%. En la última temporada se llegaron a obtener entre 98.000 a 105.000 kilos por hectárea, todo un récord en el país. Muestra de la importancia que tiene San Juan en el mapa nacional del tomate para industria es que con esas 2.000 hectáreas, la provincia representó el 32% de la superficie cultivada en el país, que fue de 6.232 hectáreas.
Para la próxima temporada, para lo cual ya se inició la siembra, la expectativa era llegar a unas 2.500 hectáreas, según se expuso en el V Encuentro Argentino del Tomate, que tuvo lugar en junio pasado en la provincia. "Pero no vamos a llegar a esa cifra porque San Juan no escapa a la situación nacional", dijo Ariel Lucero, secretario de Agricultura. Y mencionó que entre los insumos que se han visto afectados por la suba del dólar se encuentran las cintas de riego, semillas, fertilizantes y agroquímicos.
Guillermo Quiroga, un productor sanjuanino que es el presidente de la Asociación Tomate 2000, dijo que "por los problemas financieros sólo se va a llegar a equiparar la superficie cultivada de la última temporada". Y mencionó el fuerte incremento en los costos que los han afectado, entre los que mencionó la fuerte suba del gasoil, con el que se mueven las maquinarias, que ha tenido 14 subas en lo que va del año, además del incremento de la electricidad, tomando en cuenta que se trata de una actividad con un fuerte componente de riego por goteo.
Como muestra del fuerte crecimiento de la actividad, se puede mencionar que en el 2011 sólo el 11% de las plantaciones tenían riego por goteo y ahora el 96% cuenta con este sistema. El trasplante mecánico pasó del 20% en el 2015 al 49% en el 2018, mientras que también se incrementó la cosecha mecanizada, que trepó del 8% en el 2013 al 75% de la superficie cultivada en la pasada temporada. Y entre el 50 al 60% del tomate que se produce en San Juan se industrializa en fábricas locales. Hay que mencionar que el puré de tomate es el producto final más importante.
Efectos de la quiebra
La reciente quiebra de la empresa Alco-Canale, la mayor exportadora de conservas de Mendoza, también ha tenido sus efectos entre los productores sanjuaninos, porque había un grupo que vendía su producción a la empresa de la vecina provincia. Pedro Martín, del Vivero Fitotec, que elabora la mayoría de los plantines del tomate para industria, contó que también era proveedor de la firma y que junto con unos 17 productores locales ya venían afectados por la situación de la empresa. Así fue que por una deuda generada hace más de dos años atrás iniciaron una demanda judicial. Con la intervención de la justicia, en enero de este año lograron cobrar alrededor del 93% del capital de la deuda, estimado en unos 12 millones de pesos. Y que la actualización la iban a cobrar a partir de julio pasado, pero Alco-Canale nunca les pagó la diferencial. La situación se agravó con la quiebra de la empresa, que en Mendoza empleaba a 140 personas.